En este mundo donde las mentiras son de verdad y la verdades de mentira, donde lo real puede ser virtual y lo virtual una realidad que crece, el viejo crédulo de Hernán Taranca se tomó en serio el regalo que le trajeron.
Le dijeron que era una copia del Manuscrito Voynich y que el mundo quería saber su contenido y quien se lo trajo le dijo, «vos que SOS tan curioso, tirando a chusma, lo podes interpretar…”.
Qué bicho es ese.- Preguntó.
– Una reliquia, de esas que no se encuentran todos los días, lo que tiene de bueno es que nadie en la tierra, desde tiempos ha, ha podido descifrar nada de lo que dicen, y mirá que pasaron sabios, eruditos, clarividentes, oráculos, pae, pastores, curas y rabinos, gente de la ciencia, y nadie picó ni por ahí. Están los mentirosos de siempre que dicen que si, pero, no.
– Te agradezco la fe que me tenés, pero, tal vez es más fácil sacar el 5 de Oro, y te digo, creo que dentro de un tiempo lo saco porque estoy a menos de quinientas mil combinaciones posibles, ya descifré más de dos millones de ellas, con eso te digo todo…
– Yo sé que vos podés, también quien gana las elecciones quienes salen diputados, senadores, quien sale campeón uruguayo, todos los días te vienen a consultar por tantas cosas…
– Si, hoy tengo agendado a Mieres, Salles, a Heber, al Pacha Sánchez y a Ortuño, y a varios del terrruño que no te los nombro porque vos no te aguantás y lo salís a contar por ahí, y si yo soy chusma, vos venís a rueda…
– Vos sos un Malla Oro….
– y es de verdad este librillo?
– Y yo lo pagué como autentico, me costó mis buenos pesos, pero sé que si vos lo descifrás, algún cambio me tirás cuando te hagas rico…
-Trifón Sena, amigos como vos no abundan por estas tierras de Dios…Gracias por el fuego dijo Mario Benedetti.
Hernán no era tipo de quedarse, y apenas se fue su amigo, se puso a googlear como loco.
Encontró en Internet lo que se dice del tema: «Se conoce como el Manuscrito Voynich, tiene 234 páginas, 38 mil palabras y más de 500 años. Su nombre es por Wilfrid Voynich, comerciante de libros raros que lo adquirió de una colección jesuita en Italia, alrededor de 1912. Un heredero le vendió el manuscrito a otro comerciante que lo donó a Yale en 1969. Nadie ha podido descifrarlo en qué idioma está escrito. Tiene ilustraciones de plantas extrañísimas, zodiacos, estrellas, cosmos; listas como de fórmulas medicinales junto a dibujos de hierbas y frascos delgados. En las más llamativas, grupos de mujeres desnudas sostienen estrellas con cuerdas como si fueran globos o están en albercas verdes nutridas por canales con chorritos y tubos que parecen trompas de falopio. ¿Se están bañando o trabajan como plomeras en plantas depuradoras de agua?».
Se enteró también Hernán que muchos se adjudicaron el desciframiento del Manuscrito Voynich. Si aclarar en qué idioma estaba escrito, dijeron mil cosas de su contenido, desde mensajes y cura de Jesús para terrestres del futuro (futuro que es este presente, según de una interpretó Hernán Taranca, de solo ver la tapa del manuscrito).
Enfrascado en la lectura de lo escrito en Internet, como quien dice, allí, en google, absorbió otro tramo del fascinante comentario: «Uno dijo que era obra de Roger Bacon en el siglo XIII y que algunas ilustraciones eran la galaxia de Andrómeda y espermatozoides que él había visto en un telescopio y en un microscopio cientos de años antes de que se inventaran. Otro dijo que era un manual flamenco sobre rituales de muerte para un antiguo culto a Isis. Otro vio en el manuscrito la firma de Da Vinci. Otro dijo que un “semita” lo había escrito en hebreo “cifrado” y era un mensaje de extraterrestres sobre “nuestra futura destrucción”.
– Esto es como mirar un informativo uruguayo, de esos centrales de las 19 horas, tiene de todo, todos piensan de todo, hacen de todo, prometen de todo, parece que fueran de Campo de Todos, que es de todos y no es de nadie, porque no hay escrituras, y eso es una verdad incontrastable e incontrable por esa zona de Salto.
Y miren si será cierto lo que piensa Hernán, de ese mundo paralelo, similar, semejante, gemelo, del Manuscrito de Voynich y «los informativos», o de los personajes que desfilan por los informativos, desfilan y desfilan, como en un 25 de agosto eterno, y los televidentes aplaudimos con los ojos y los oídos y nos miramos, en el living para asegurarnos que lo que oímos y vimos sucedía en tiempo real y concreto.
Dicen que la experta medievalista Lisa Fagin Davis, mientras usted lee esto en el diario de Salto, encabeza el desciframiento del manuscrito. Aún no saben qué dice pero empiezan a saber cómo dice. Por la repetición de palabras idénticas y similares deducen que algunos pasajes son como rimas infantiles o juegos poéticos. Davis pone un ejemplo en inglés y otro en yidish. Pienso que en español pueden equivaler a “erre con erre, cigarro; erre con erre, barril…”; y a lo de Jaime Sabines: “…por olas… por alas… parece que sales y soles”. Como de niño chiquito: como de poeta inspirado. Buen comienzo para seguir descifrándolo».
Hernán quedó encantado, y esa noche no durmió porque se puso a mirar, a sacar apuntes, y a comprender, que el lenguaje de los ojos es tan válido como el de las palabras, por eso ha sido imbatible en el truco ciego y en el del 2 de la muestra, en el gofo, el poker, en la tapadita y en tantos juegos,
– Y Hernán, avanzaste algo?
– Te parece?, hace una semana que estoy a mate, café negro, algunas variedades del panchero de la esquina que pasa para ver si necesito algo para mi estómago y meta mirar el manuscrito que me trajiste, a veces me parece estar leyendo un poema de Beltrán Gómez, a veces, alguna reflexión de Arón Viera o de este muchacho que es candidato a Presidente que se ve que es muy Voynicichyano a la hora de su macramé estoico.
Yo te digo muchas cosas me remontan a los griegos o otras a pandorgas de Semana Santa, con dulce de zapallo, tortas fritas, pizzas regordetas, empanadas de vigilia y bacalao noruego hecho cazuela por la vieja.
Es como que dice que dice, pero no dice, porque se contradice, es como estar en Disneylandia o en el Parque Rodó o en el circo mágico ese que cada tanto viene por nuestra ciudad. Las figuras giran como en una calesita, y voy para atrás y para adelante, para arriba y para abajo, para un costado y para el otro, y veo a una pareja, me parece Adán y Eva, con ropa, Tarzán y Jane, con ropa, yo y aquella, con ropa, me entendés?
Veo a Maduro, a Milei, a Fabián, y me digo, capaz son las piezas claves que faltan dentro del Manuscrito de Voynich, para entender esto en forma más sencilla, y pienso que el eslabón perdido, se perdió sí, pero no murió, y resiste firmemente con los mencionados anteriormente y con ese chico que aspira a la Primera Magistratura, y que desespera a propios y extraños por no alcanzar nunca la redondilla.
Para mí que ese manuscrito fue redactado en nuestro país, por manos de acá, lápices de acá, dibujos de acá, medio Darianos, los mismos, esa ratita y esos trazos que se ven en Voynich tienen esencias cienmanzanisticas, no me digas que no…
-Bueno, es todo un tema.
– Ya le estoy viendo las patas a esa sota del manuscrito, en cualquier momento, le saco la ficha….
– Por eso te lo traje.
– Tiembla verde…
– El Gordo?
– No, el pasto…
CAMACA
