La rebeldía con la que los salteños nos hemos criado ante las adversidades, son una oportunidad para hacer frente a lo que se viene
En oportunidad de la reciente visita a Salto del Ministro de Economía Gabriel Oddone en el marco de los 120 años del Centro Comercial e Industrial de Salto, se presentó un video realizado por los Magister Pablo Cortondo y Nicolás Remedi sobre las brechas existentes en materia de inversión entre el norte y el sur en materia de PYMES. EL PUEBLO conversó con Remedi sobre los alcances de esta situación y cómo esta experiencia le ha permitido recorrer otros países investigando y exponiendo sobre nuestra realidad.
– ¿Qué le dejó la visita del Ministro Oddone de hace unos días?
– Ha sido una buena oportunidad para generar un diálogo que es necesario entre el Estado y el territorio, donde la política pública, por más bien intencionada que esté, al norte, no necesariamente la ha beneficiado en materia de lo que es la competitividad de la micro, pequeña y mediana empresa. Los datos hablan por sí solos y de alguna manera está bueno estar sensibilizados y yo diría, también construir un sentido de emergencia donde tenemos que reconocer que los fondos de innovación están llegando muy poco al norte. Y es una cuestión alarmante que es importante poder revisar cuáles son sus causas y poder generar acciones del territorio en pos de lograr una mejora para Salto y para la región.
– El ministro Oddone dijo que se presentan pocos proyectos en esta región, ¿es así?
– Es un tema vinculado a la institucionalidad y a la existencia de capacidades locales. Y también hay un tema de fondo que no es menor. Estamos saliendo recién de lo que fue la iniciativa del Uruguay Innovation Hub, que buscaba promover los temas de innovación y, paradójicamente, el MGAP no estaba sentado en la mesa del Uruguay Innovation Hub, que era la política pública de innovación, en un país en donde desde la escuela nos enseñan que el agro y la ganadería son quizás una de las cuestiones más importantes. Entonces, dicho esto, yo creo que en verdad parte de la explicación de por qué hay pocos proyectos de innovación aprobados al norte es porque la manera de concebir la innovación está muy alejada de lo que es la mirada más de lo agropecuario, de lo agroindustrial y de la ganadería. Yo creo que hay que revisar de qué hablamos cuando hablamos de innovación, si lo que realmente queremos ponderar es lo novedoso o es lo que mejora la rentabilidad. La innovación, al final del día, es un tema de adaptación a los mercados y precisamos, allí, empezar a revisar un poco los conceptos.
Y el otro elemento no menor es también entender cuáles son los actores y los brazos que tiene el norte para justamente ayudar a emprendedores y emprendedoras que tenemos, y muchos, por suerte. Sin embargo, entiendo que todavía falta seguir fortaleciendo a la universidad en el norte, a los entramados institucionales, cámaras, centros comerciales, gobiernos subnacionales, para que tengan una capacidad de acción y de ayuda y respuesta a nuestras PYMES.
Es importante destacar y creo que sería muy valioso poder sostener y seguir mejorando lo que será la implementación de la nueva Ley de Inversiones, que permitirá llegar a un segmento de PYMES mucho más chico a lo que hoy está llegando. Y después, de alguna manera, estar a la expectativa sobre lo que va a ser la nueva política vinculada al tema de frontera.
– Este estudio que realizó fue presentado en Guatemala, ¿podría contarnos?
– Desde el Observatorio Económico de la Universidad Católica de Uruguay venimos trabajando desde 2022, en entender eso que termina siendo un poco paradójico. Se habla mucho de la innovación, de la sostenibilidad, de la economía circular, al punto que muchas veces yo diría empacha, porque se habla mucho de estos temas, pero no necesariamente el bolichero, al comerciante. Y un poco lo transmitido en la experiencia en Guatemala, en un congreso de innovación promovido por la Universidad San Carlos de ese país, ha sido seguir esta búsqueda de hacer emerger esto que pocas veces quizás, no sé si está tan visibilizado, de que la PYME en verdad a veces no puede, a veces sin querer. La jerga del emprendedurismo y la innovación dice que querer es poder. ¿Y qué hacemos con el bolichero que quiere llegar a fin de mes, quiere pagar los sueldos, quiere pagar los aguinaldos, quiere pagar los impuestos, quiere salir adelante y el empresario no puede? Entonces, es muy importante y saludable para el sistema ir hacia una manera de entender que la PYME necesita plata y tiempo, y eso no está. Eso ha sido lo que venimos comunicando, investigando y trabajando, no sólo en Guatemala sino en algunos otros países.
– Ha recorrido otros países de América Latina estudiando su realidad en estos temas. ¿Cómo está Uruguay comparativamente con los países que ha visitado?
– Uruguay ha hecho mucho y eso no nos debería conformar. En términos de inversión en el PIB, Uruguay invierte 0,44% de investigación, desarrollo, innovación. Es decir, estamos relativamente bien si nos comparamos con América Latina en lo que es inversión de recursos. Sin embargo, si nos comparamos con los mejores de la clase, estamos muy lejos. La inversión que hace Israel, Corea del Sur, Estados Unidos, Alemania supera siempre el 4% del PIB. Entonces es una cuestión de relatividad. Entiendo que los desafíos que tienen Uruguay y América Latina en general son similares. Me queda la sensación que todavía la universidad está lejos del entramado productivo. Si bien se ha hecho mucho, todavía estamos lejos y es necesario poder seguir apostando a la vinculación entre la universidad y el sistema productivo. Y también hay mucho por recorrer en materia de incorporación de tecnología. Recién ahora se está trabajando en algunos instrumentos que buscan cofinanciar o subsidiar quizá de manera más sencilla que antes. En Uruguay, la incorporación de tecnología siempre ha sido necesaria y bien valorada por los empresarios.
– ¿Cómo ha visto la evolución del emprendedurismo salteño?
– El emprendedurismo en Salto tiene la ventaja que hay muchas puertas para golpear. Somos un lugar chico, hay un lindo ecosistema en donde nos conocemos todos, el vínculo con la institucionalidad la siento como muy cercana al emprendedor. Entonces, allí el desafío hoy es poder ayudar a que más emprendedores se acerquen a golpear puertas a las diferentes instituciones que están de alguna manera esperando poder ayudar a los emprendedores. Y también siento la sensación que estar en una región fronteriza y tener las particularidades que tiene Salto nos obliga a pensar siempre un poquitito a más.
Hoy, frente a lo que ha sido el tiempo atrás, es cada vez más importante hablar de innovación. Quizás hace un tiempo, no sé si era un tema tan determinante, pero hoy es necesario poder ayudar a los emprendedores a que puedan diferenciarse de sus competidores en cada uno de sus mercados y que puedan no competir por precio. En realidad esto, diciéndolo un poco en criollo, es ayudar a los emprendedores a que puedan competir por calidad y no por precio, porque cuando competimos por precio, aparece aquello de la competencia desleal, de la informalidad, de los precios de frontera. Si entramos a recortar márgenes, nos va a ir mal a la larga o a la corta. Entonces, está bueno que el emprendedor pueda buscar eso que lo hace distinto, único. Y allí está bueno visualizar, por suerte, que en verdad las oportunidades están. Lo que faltan quizás son emprendedores que puedan estar cada vez más cerca de las instituciones, de los técnicos y poder allí acercarnos a golpear puertas.
– La última palabra es suya.
– El mensaje final es de esperanza. Me queda la sensación que se viene haciendo todo un camino desde los entramados institucionales, en donde hay mucho que se ha avanzado, pero también, por suerte, hay mucho por hacer. Y creo que el poder ver el vaso medio lleno sobre lo que se ha hecho y con esperanza poder enfrentar los desafíos que tenemos en materia de empleo, en materia de competitividad, creo que tenemos las herramientas y Salto ha demostrado que puede. Esa es un poco la rebeldía con la que los salteños nos hemos criado, de poder ver quizás las adversidades y la situación de estar tan lejos de la capital como una oportunidad para poder hacer frente a lo que se viene.
Aprovecho esta oportunidad que me brinda EL PUEBLO para invitar a una charla que será este miércoles 5 de noviembre, que tratará sobre “¿Cómo se impulsa la innovación en los territorios? El caso de Centroamérica”. Los esperamos a las 19.45 horas, en la sede del Campus Salto de la Universidad Católica (Artigas 1251), Salón Bildung. Será una actividad sin costo y abierta al público.
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PERFIL DE NICOLÁS REMEDI
Es del signo de Acuario.
De chiquito quería ser profesor de Historia
Es hincha de Peñarol.
¿Alguna asignatura pendiente? No tiene.
¿Una comida? Lasaña.
¿Un libro? El hombre en busca de sentido.
¿Una película? La sociedad de los poetas muertos.
¿Un hobby? Pescar.
¿Qué música te gusta escuchar? De todo un poco.
¿Cuál es el mejor día de la semana? Lunes.
¿Cuál es el peor día de la semana? Puede ser que no haya.
¿Qué es lo que más te gusta de la gente? La honestidad.
¿Y lo que menos te gusta de la gente? La hipocresía.
