FRENTE. La semana pasada comentamos la buena votación que hubo en la interna del FA, donde creció en todo el país respecto a la interna de 2016. Salto en particular creció un 77%. Era para festejar, como efectivamente ocurrió en todo el país, menos en Salto.
AVERGONZADA. Ese es el sentimiento que dice tener la presidente del FA Mónica Cabrera tras descubrir algo que ya se sabía desde el mismo día de la elección, pues la comisión encargada de organizar el acto eleccionario tomó conocimiento inmediatamente de algunas desprolijidades administrativas de los encargados de las mesas receptoras.
CRÍTICAS. Cabrera apuntó «sus críticas a los integrantes de las mesas receptoras de votos, que no actuaron con la seriedad, responsabilidad esperada. La dirigente del FA señaló que ella entendía y esperaba que cada miembro de mesa receptora de votos estuviera preparado, capacitado para cumplir con la tarea, recabando los datos y aplicando los controles» (La Prensa, 14.12.21).
DOS. Cabrera generaliza en su análisis a todas las mesas receptoras de votos, sin embargo, el problema se radicó básicamente en dos circuitos, donde al inicio de la votación se omitió registrar quiénes iban votando, hasta que encontraron la libreta (sic) y comenzaron a hacerlo. Hasta ese momento se calculó que iban votando unas 50 personas. En lugar de anular o separar esos votos no registrados debidamente, la comisión encargada de organizar el acto eleccionario les permitió continuar votando sin problemas.
MPD. En esos dos circuitos terminaron votando cerca de mil personas. El lunes, en la Mesa Política (MPD) el dirigente Andrés de la Iglesia «sorpresivamente» mocionó anular ambas urnas fundamentando en las «desprolijidades». Sectores del FA se movilizaron y pidieron que la Comisión Electoral Nacional interviniera, lo que llevó a que ésta solicitara que ambas urnas fuesen enviadas a Montevideo donde serán escrutadas.
MALESTAR. Hay malestar en la interna del FA por lo que pasó el lunes en la Mesa Política, entendiendo que se trata de una «burda maniobra» para bajar el coeficiente necesario para que algún sector que votó medianamente bien pueda mantener su lugar en la MPD. Sería distinto si el coeficiente se midiera con mil votos menos. No en vano ni el Partido Comunista ni el Partido Socialista ni el Movimiento de Participación Popular se hicieron presentes el lunes en la MPD, como forma de no convalidar dicha supuesta «maniobra».
ACERTIJO. Ya dijimos la semana pasada que los principales dirigentes de los sectores opositores a Vamos Salto del Partido Colorado no participaron de la marcha junto a Álvaro Delgado. ¿Jugarán algún papel en la campaña por el referéndum de la LUC o dejarán que solo Albisu y Coutinho lleven el mayor peso del resultado en las urnas?
