Habría que reconocer que en la Liga Salteña de Fútbol, las instituciones desde el punto de vista deportivo, pueden llegar a dividirse en tres bloques.

1) un núcleo minoritario que parece despegado en dos áreas claves: la deportiva y la económica.
2) el núcleo intermedio incluyendo por lo menos al 50% de lo clubes: son lo que no tienen o no pueden alcanzar la continuidad del núcleo minoritario, pero tampoco s-urgen rezagados con respecto a la pretensión de protagonismo que no dejan de alentar.
3) el núcleo restante,entre el 25 y el 30 por ciento, permanece en un estado de permanente apremios y límites económicos y como consecuencia de ello, distantes de avanzar en perspectivas deportivas. Que algunos clubes señeros del medio como Cerro, Almagro, Lazareto y Peñarol militen en la Divisional «C», es toda una consecuencia o una síntesis de lo expuestos.Todosellos enalgún momento fueron partes de la Divisional «A» e incluso Peñarol, Campeón Salteño. Pero los tiempos se alteran. Las realidades se modifican y la penumbra en más de un caso, también es capaz de llegar.