La Liga Salteña de Fútbol se encuentra en una encrucijada respecto a su futuro. Algunos dirigentes consideran la posibilidad de que el fútbol de la Divisional «A» inicie su temporada en septiembre y la finalice en marzo del año siguiente. Si esta opción se plantea como una alternativa viable, varios aspectos reglamentarios tendrían que modificarse a través de asambleas. Es evidente que algunos neutrales están convencidos de que “algo hay que hacer para evitar la profundización de un mal: cada vez menos aficionados en los escenarios donde se juega fútbol”.
El fenómeno de los senior
En las últimas semanas, los contrapuntos de opinión han surgido con fuerza. Existen quienes sostienen que «la Liga Salteña debiera abrir frentes de contacto con aquellas ligas que operan en el medio y que se convierten en competencia frontal». Se hace referencia a la Liga de Fútbol Sénior, que juega sus partidos los sábados por la tarde, y la Liga de Fútbol Súper Senior, que lo hace los domingos por la mañana. Cientos de jugadores acuden a estas citas, considerando el número de equipos involucrados en la actual disputa. Además, se debe tener en cuenta la Asociación Máster de Fútbol de Salto, habilitada para mayores de 55 años, y la Liga Comercial.
Ideas nacientes
Se argumenta que quienes forman parte de estas ligas colaterales—jugadores, directores o aficionados—no acudirán a observar los partidos de la Divisional «A» o «B» en la Liga Salteña. La idea naciente es generar un punto de partida en el diálogo para evitar la acumulación de torneos en determinados meses del año, cuando la inactividad suele ser predominante.
El objetivo es que el fútbol sea una alternativa constante durante todo el año, manteniendo la racionalidad en la programación. Así, entre sábado y domingo, no se deberían jugar entre 60 y 80 partidos, sumando todas las ligas vigentes.
Resumen
La Liga Salteña de Fútbol considera iniciar la temporada en septiembre y finalizar en marzo, enfrentando la competencia de ligas senior que afectan la asistencia de aficionados. Se busca evitar la acumulación de torneos y fomentar el diálogo entre ligas.