Salto ha sido un departamento muy prolífico en actores, en elencos teatrales y en compañía o conjunto de teatro que han movido las tablas por décadas. Muchas figuras conocidas de la cultura, fueron parte del patrimonio escénico de nuestra ciudad y luego, tomaron otros rumbos artísticos, creativos, se transformaron en poetas, cantores, pintores, escritores, periodistas, pero siempre con el teatro colgando junto a su corazón.
A comienzo de este nuevo siglo, el fervor por el teatro fue muy grande, y hubo siete grupos trabajando, con puestas en escenas, con encuentros de teatro muy interesantes y con un poder de convocatoria, también, muy interesante y constante.
A medida que nos adentramos en el Siglo XXI se perdieron muchos actores, grupos que se quedaron por el camino, sin elencos. Los Talleres Municipales trajeron en parte el recambio, pero la gente joven emigró, se fue a estudiar. A trabajar, o a vivir a otros países.
Quedaron Kalkañal, La Galera y Sintapujo como bastiones, en una trinchera en la que luchan sin pausa y sin tregua. También quedó la directora Yanely De Vecchi quien pone en escena alguna obra, de tanto en tanto, pero su presencia enriquece las tablas.
COLOQUIO DE LOS AVATARES
Ya en territorio de actores, nos encontramos en el umbral de un coloquio, que pareció interesante, y para el mismo tuve la intención de convocar a Pablo Sánchez de Kalkañal, a Ricardo González Vetey de La Galera y a Oscar Bibbó.
Por esas cosas de la vida no me pude comunicar, reunir y elaborar lo que pensaba hacer. El tema es que ya estaba en marcha la propuesta del coloquio y en plena introducción donde estaba explicando y sentando bases en el tema a discutir, me dije, a falta de directores y pares, buenos son avatares. No lo pensé más y en el desarrrollo expuse la problemática en si, y por qué es importante discutirla. Y no me olvidé de la conclusión y dejé un espacio para la generación de un debate, con un dialogo para enriquecer el encuentro.
Los avatares no demoraron en aparecer, en ser parte de esta puesta en escena que hacia mutis por el foro desde mi mente al papel…
Y si bien los estilos de cada uno eran muy distintos, los unía la pasión por l oque hacían o representaban…
La pasión de los actores abarca una amplia gama de emociones y habilidades, desde el drama más profundo hasta la comedia más hilarante. Cambiar entre estos dos géneros no solo requiere talento, sino también una gran dedicación y amor por el arte.
Uno de los avatares sostuvo que en el drama es donde los actores realmente muestran su habilidad para conectarse emocionalmente con sus personajes y, por ende, con la audiencia. Pueden explorar temas complejos, expresar dolor, alegría, amor y pérdida, todo lo cual puede resonar profundamente con el público.
A su lado otro de los avatares indicó que sentía más cómodo haciendo comedia, y que aunque puede parecer más ligera, la comedia es un género igualmente desafiante. Requiere un excelente sentido del timing, la habilidad para improvisar y, a menudo, una gran inteligencia emocional para captar las sutilezas del humor.
Muchos actores encuentran en la comedia una forma de catarsis y una oportunidad para conectar con el público de una manera más directa y jovial.
El tercer avatar no se quedó callado y dijo que se sentía como pez en el agua cuando encarnaba a un personaje psicológico. Cuando un actor encarna a un personaje psicológico, se sumerge en la mente y el espíritu del personaje para hacerlo lo más auténtico y convincente posible. Este proceso va más allá de memorizar líneas; implica entender las motivaciones, miedos, deseos y conflictos internos del personaje.
ACTORES CLÁSICOS, DE VANGUARDIA, DE COMPROMISO
Sentamos las bases para un diálogo, una especie de obra, que tendrá a un actor clásico sobre las tablas.
Avatar que iba a representar el actor de obras tradicionales y clásicas me dijo qu enfrentan un desafío único y fascinante. Interpretar personajes en obras que han sido representadas innumerables veces requiere no solo una comprensión profunda del texto y del contexto histórico, sino también la habilidad para aportar una perspectiva fresca y personal. Las obras clásicas, como las de Shakespeare, Molière o los dramaturgos griegos, tienen un lenguaje y una estructura específicos que los actores deben dominar. Esto implica una cuidadosa atención a la dicción, el ritmo y la poesía del texto.
Por su parte del avatar que representaba al actor de vanguardia fue claro al señalar que: El actor de vanguardia se destaca por su capacidad para romper moldes y desafiar las convenciones tradicionales del teatro y el cine. Este tipo de actor no solo interpreta personajes, sino que también busca innovar y experimentar con nuevas formas de expresión y técnicas de actuación. Los actores de vanguardia a menudo trabajan en proyectos que exploran temas y estilos no convencionales. Pueden colaborar con dramaturgos y directores para crear obras originales o reinterpretar clásicos de manera innovadora. La capacidad de adaptarse a diferentes estilos y técnicas es crucial. Estos actores pueden pasar de métodos tradicionales a enfoques más abstractos, a menudo combinando elementos de teatro físico, performance art y multimedia.
Y a falta de tres actores iniciamos el coloquio con tres avatares: un clásico, un vanguardista, y un actor comprometido con los social y político
Actor Clásico (AC): «En mi enfoque, la fidelidad al texto y la tradición es fundamental. Obras de Shakespeare o Sófocles tienen una riqueza que trasciende el tiempo. ¿Cómo ven ustedes la relevancia de estas obras en el mundo moderno?»
Actor Vanguardista (AV): «Aunque aprecio las obras clásicas, creo que es crucial reinterpretarlas y adaptarlas a nuestra época. La vanguardia trata de explorar nuevas formas de expresión y romper con las convenciones. ¿No creen que el arte debe evolucionar constantemente?»
Actor Comprometido (ACo): «Para mí, el teatro es una herramienta para el cambio social. Ya sea clásico o vanguardista, lo importante es cómo podemos usar nuestra plataforma para abordar temas de justicia social, política y derechos humanos. ¿Cómo integran ustedes estas cuestiones en su trabajo?»
AC: «Sin duda, el teatro clásico puede reflejar los dilemas humanos universales que aún son relevantes hoy en día. La clave está en la interpretación y en cómo presentamos estos temas a una audiencia moderna.»
AV: «Exactamente, y es ahí donde la vanguardia juega un papel esencial. Al desafiar las expectativas del público, podemos hacer que reconsideren su perspectiva sobre los problemas actuales. Es una forma de mantener el teatro vivo y relevante.»
ACo:»Ambos tienen puntos válidos. Al final del día, sea cual sea el estilo, lo esencial es conectar con el público y provocar una reflexión sobre nuestra sociedad. Ese es el verdadero poder del teatro.»
Los tres me quedan mirando y les digo, tomo partida por los tres y me gustaría verlos en una obra sui generis hacer cosas de los tres tipos de actores
Una obra sui generis que combine lo mejor de los tres tipos de actores sería una experiencia teatral única y enriquecedora. Imagina una producción donde cada escena, o incluso cada acto, permita a los actores mostrar su versatilidad y profundidad, mientras se entrelazan los estilos clásico, vanguardista y comprometido.
Acto 1: El Clásico Modernizado
Comienza con una escena basada en una obra clásica, pero adaptada a un contexto moderno. Aquí, el actor clásico puede brillar con su dominio del texto y la tradición, mientras los otros actores aportan toques de contemporaneidad y relevancia social.
Acto 2: La Vanguardia en Acción
En el siguiente acto, la obra se transforma en algo experimental y abstracto. El actor vanguardista lidera la escena con técnicas innovadoras y rompedoras, mientras los otros actores encuentran formas de integrar la profundidad emocional y las temáticas clásicas.
Acto 3: El Impacto Social
Finalmente, el último acto se centra en temas sociales y políticos actuales. El actor comprometido utiliza su pasión por el cambio para llevar el mensaje al público, mientras los otros actores contribuyen con sus habilidades en el drama y la experimentación para crear un cierre poderoso y reflexivo.
Epilogo: La Unidad en la Diversidad
La obra concluye con una escena que reúne todos los estilos, mostrando cómo la combinación de diferentes enfoques puede enriquecer y profundizar la experiencia teatral. Los actores colaboran para crear un mensaje de unidad en la diversidad, destacando la importancia de cada enfoque y cómo pueden complementarse entre sí.
The End.
Este tipo de producción no solo sería una celebración del arte teatral en todas sus formas, sino también una poderosa declaración sobre la versatilidad y la riqueza de la actuación. Qué les parece,?.
