No es un final, es un nuevo inicio.
Lic. Alejandro De Barbieri
“En el fondo es un encuentro humano, el duelo, el recuerdo, la gratitud, honrar la memoria”
Alejandro De Barbieri es un reconocido Psicólogo, escritor y Director del Centro de Logoterapia y Análisis Existencia (CELAE), especialista en todo lo que concierne al espíritu, la mente, el alma. Una vez más nos posibilita tener una visión particular de temas tan importantes y enquistados en la sociedad como son el de la muerte y esa rara celebración que se concentra en diferentes lugares llamado Día de LOS Muertos. Compartimos con ustedes sus palabras.
EL SIGNIFICADO POPULAR
Primero lo que me sale decirte es que hay un filósofo que está de moda porque ganó el Premio Princesa de Asturias, Jung Chul Han, que yo lo leo hace años, que es un genio, y es un filósofo coreano-alemán, y él habla en uno de sus libros que se llama “La desaparición de los rituales”. Me explica en ese libro cómo han desaparecido los rituales, más allá de lo religioso, de lo social. Entonces, el 2 de noviembre, la verdad que no es igual.
Nosotros venimos de México en este momento, y en México es impresionante el Día de los Muertos, cómo se celebra. Es una celebración, aparte, a todo color, con muchísimo color. Hay una foto que nosotros sacamos de Guadalajara que te impresiona, todo con las calaveras, que ellos les tienen un nombre, no me acuerdo, que se llama Catrina, no sé si se llamaba, no me acuerdo, y todos los altares en el aeropuerto.
En cualquier lugar donde vamos hay altares que hacen con flores, con fotos de sus propios muertos, de familiares o de gente conocida, y eso lo celebran con bailes. Los rituales ayudan a esto, a la necesidad de recordar, de agradecer y de resignificar esa ausencia. O sea que todos nos ayudan a hablar del dolor, nos ayudan a transformar ese dolor en amor.
Va a depender, obviamente, si la persona, por ejemplo, hay alguien que está haciendo un duelo de hace un año, de hace dos años, o de hace seis meses, o si el duelo fue por suicidio, o si el duelo fue porque el abuelo se murió porque ya estaba mayor y tuvo una enfermedad. Los duelos también influyen en cómo es que muere la persona, se influye en el proceso de elaboración del duelo. Pero me parece que sigue siendo importante en Uruguay, esto del 2 de noviembre, la importancia de los rituales, que es ir en grupo, sea religioso o no religioso, la gente que va al cementerio, o la gente que es creyente, que va a misa, o a la religión que pertenezca.
EL DUELO
Todo eso sirve para dar lugar al duelo, para llorar, para acompañar, para recordar las cosas del abuelo, las cosas de otro ser querido. Y bueno, se enciende una vela, o se escribe una carta, o simplemente se camina en silencio. Yo te contaba, en México se hace un altar, pero se puede leer un poema, se puede compartir algo después. En México tienen mucho esto de compartir comidas, a nosotros nos parece raro, pero me parece lo importante es escuchar, acompañarnos, acompañar a veces en silencio, no solo con las palabras.
Preguntarles si vamos a acompañar a una persona querida, si querés ir al cementerio, querés ir a una misa, querés mostrar una foto del abuelo, de la abuela, y ahí bueno nos reímos o lloramos, simplemente recordamos. Y eso en el fondo es reafirmar la vida, reafirmar que nuestros muertos no están en el pasado, sino que forman parte de nosotros, y que también es importante estos rituales. Sin lugar a dudas.
LA CELEBRACIÓN EN UN PAÍS LAICO COMO URUGUAY
Mira, en este momento estamos entrando en un retiro, con mi señora; un retiro de un grupo que se llama Amigos del Desierto, que es un retiro de meditación, y es un retiro donde se trabaja la espiritualidad, hay crecentes, hay budistas, hay ateos, justamente mirar en el día de Magarrat, o sea que no es un tema a veces asociado. Por más que hacemos un país laico, Uruguay, para bien y para mal, por ejemplo, se está trabajando mucho en otros países, de por qué justamente nosotros tenemos la tasa de suicidio tan alta, cuando los países que tienen un enfoque más religioso o espiritual, no tienen la cantidad de suicidio que tenemos nosotros, eso lo está haciendo una psicóloga de la Universidad de la República, trabajando justamente proyecto de vida, en vez de hablar de espiritualidad o de religiosidad, primero que hay una espiritualidad sin Dios, cada vez que hablamos de lo humano, cada vez que hablamos de la esencia, de las personas, del alma, ahí estamos hablando de una espiritualidad sin un Dios en particular, y eso por más que las religiones están en crisis, como tú decís, pero no lo espiritual, lo espiritual está creciendo muchísimo en todo el mundo.
Yo doy cursos de logoterapia, acá hablamos de la dimensión espiritual, y bueno tengo 60, 80 alumnos todos los años, psicólogos que saben que para trabajar con un paciente, hay que hablar de lo espiritual, después está lo religioso, que ya es personal, me explico, pero lo espiritual nos une a todos, entonces yo creo que hay un respetar toda la forma de búsqueda que tienen las personas, y poder, justamente. Puede haber gente, como tú decís, que la tome como descanso, como simplemente está 2 de noviembre, pero está bueno retomar la fuerza de los rituales, porque eso nos ayuda, de repente hablar con gente de temas, como estamos en el 2 de noviembre, puede ser la excusa perfecta, abuela, ¿cómo recordás al abuelo? o abuela, ¿cómo querés pasar? o a un amigo, por ejemplo, si perdió, su señora joven por un cáncer, gente que tiene otras pérdidas que de repente no las hablamos, porque también somos demasiado cuidadosos, o no quiero entrar en las emociones del otro, o porque me emociona hablar de la muerte, y no quiero hablar, también reprimimos, entonces, a veces podemos pecar, me explico, de que no me interesa el tema, pero de repente porque me moviliza tanto, que me da miedo a mí hablar, preguntarle a mi amigo cómo está con respecto a la muerte de su señora, etc. En el fondo es un encuentro humano, el duelo, el recuerdo, la gratitud, honrar su memoria, y bueno puede haber rituales que son más religiosos, obviamente todas las religiones tienen sus propios rituales, pero puede haber rituales laicos, como encender una vela, dejar una flor, dejar una carta, hacer un minuto de silencio, caminar en la plaza, o sea todo lo que sea con respeto y con cuidado puede ayudar, cómo querés que lo recordemos hoy, cómo te gustaría homenajearlo, ofrecernos a la presencia y evitar el juicio, si de repente la abuela quiere ir a misa, y vos no sos creyente, o sos creyente pero ya no vas a misa, no es tu tema, bueno, pero la puedo acompañar, me explico, porque para ella es importante.
EL MIEDO A LA MUERTE
Bueno a ver, la muerte siempre la negamos, siempre se niega la muerte, recordemos que hace poco que pasó, estamos en 2025, estamos en 2026, hace 5 años del COVID, 2020, 2021, que la muerte era diaria, te acordás no? y después se enfermó, estábamos con el Jesús en la boca todo el tiempo, pero la muerte se niega en general, se niega, reprimimos la muerte, reprimimos, tenemos datos, cuando cumplimos 50, cuando cumplimos 40, tenés más canas, si muere un familiar querido, y te preguntás como en mi caso, con mis dos hijas que ya se recibieron, por ejemplo, este año se recibe la chica, o sea son datos que te van diciendo, bueno che, la vida pasa, y eso es algo que tenemos que celebrarlo también, pero si yo estoy enojado con mi vida, si estoy mal, si todavía tengo muchos proyectos que quiero hacer y que de repente no hago el duelo de que ya no los voy a poder hacer, o que los puedo hacer pero de una manera distinta, bueno, entonces todo eso a veces nos genera un espejo de lo no vivido, de lo que quisimos vivir y no vivimos, y eso genera como una represión de la muerte, pero cuando uno está en tu contacto con la vida, estás en contacto con la muerte, porque también te ayuda un duelo de un familiar o un duelo simbólico, nos ayudan a valorar la vida, reprimir la muerte, o sea vivir como si no fuéramos a morir nunca. Muchas veces nos hace caer en una vida más superficial, porque bueno, porque me parece que no voy a morir nunca, entonces cuando sos adolescente, joven, bueno, está bien, es como normal, pero el que tiene siempre la muerte presente, tiene presente la vida, por eso vuelvo a comentar lo de México, disculpas por la insistencia, pero me acabo de bajar del avión ayer, porque siempre habíamos hablado del Día de Muertos y siempre habíamos visto la película Coco, que es un peliculón que habla de los muertos, entonces tener rituales para llenar esta muerte de vida, de nuestros seres queridos y de recuerdos, es súper importante para poder repasar cómo estamos viviendo nosotros y cómo nos estamos preparando para nuestra propia muerte, porque eso es otra cosa que también nos hace espejo, la muerte de un ser querido, que creemos que no nos vamos a morir nunca, por ejemplo, mi suegro falleció hace dos años y bueno, un infarto, ya tenía su edad, pensábamos que siempre estaba bien y que se va a vivir otro año más, que vamos a tener otra Navidad o otro fin de año y de repente la vida te dice, no, no, mira, este es el último, entonces por eso hay que estar preparado.
