Publicada en The New York Times
El fotógrafo español Samuel Aranda ha ganado el premio World Press Photo corres-pondiente a 2011 con una imagen de las revueltas de Yemen publicada en The New York Times. Tomada en la capital, Sana, el pasado 15 de octubre muestra a una mujer cubierta con un niqab (el velo que deja solo los ojos libres) consolando a un fami-liar herido.
DESAMPARO Y DOLOR
En cinco años, el concurso ha visto como aumentaba de forma espectacu-lar el volumen de imágenes recibidas. La escena tuvo lugar en una mezquita convertida en hospital para atender a las víctimas de las luchas desatadas contra el presidente Alí Saleh. El desamparo del varón y el dolor de la mujer retratados semejan composiciones artísticas como la escultura de La Piedad, de Miguel Ángel. Según el jurado, “la escena resume lo ocurrido durante la Primavera Árabe no solo en Yemen sino también en Tú-nez, Libia, Egipto y Siria. Pero tiene además el lado íntimo del drama vivido”.
GALARDÓN
El World Press Photo es el galardón más importante del mundo en su género y celebraba su 55 aniversario. La edición de este año ha recibido más de 100.000 fotos captadas por 5.247 profesio-nales de 124 países. En los últimos cinco años, el concurso ha visto como aumen-taba de forma espectacular el volumen de imágenes sometidas al jurado.
EXTREMADAMENTE
DIFÍCIL
El fotógrafo español Samuel Aranda ha expresado que espera que el reconocimiento sirva para que la gente “vuelva la mirada” a la situa-ción en aquel país árabe. “Ese día fue extremadamente difícil”, ha recordado Aranda al decir que el herido que aparece en la fotografía fue alcanzado por el fuego de los francotiradores que reprimían las manifestaciones en Saná el pasado mes de octubre. El hombre, según el fotógrafo español, estaba intoxicado por los gases lanzados contra los manifestantes y había recibido un disparo en la pierna. El instante, en el que una mujer cubierta por un “niqab” negro sostiene su cuerpo, apenas duró un minuto, re-cuerda Aranda. Rápidamente, el hombre fue atendido en el interior de una mezquita utilizada como improvisado hospital, mientras a su alrededor continuaban los tiros. “Los francotiradores disparaban bastante ese día”, recuerda el fotógrafo español, que prácticamente acababa de entrar de forma clandestina en el país, enviado por el diario estadounidense The New York Times.
EXPERIENCIA
PROFESIONAL
Antes de llegar a Yemen, Aranda había cubierto para ese medio la primavera árabe en Túnez, Egipto y Libia. De su experiencia en Yemen, el fotógrafo destaca la “sorpresa” inicial ante la situación en el país y el trato con su población. “Yo pensaba encontrar algo como Afganistán o Irak. (…) Donde los extranjeros no son bien recibidos y todo es difícil”, explica. Sin embargo, Aranda se topó con una “gente maravillosa” y asegura haber vivido una de sus mejores experiencias personales como enviado a zonas de conflicto. “Lo importante en esta historia es la mujer y lo que pasa en Yemen. Nosotros documentamos. No somos artistas”, ha subrayado.
EL AUTOR DE
LA FOTOGRAFÍA
Aranda -nacido en 1979 en la ciudad barcelonesa de Santa Coloma de Gramanet- comenzó su carrera con 19 años trabajando para El País y el Periódico de Cataluña. Con sólo 21, viajó a Oriente Medio para documentar el choque palestino-israelí para la Agencia EFE, y posteriormente cubrió conflictos para diferentes medios en Pakis-tán, Líbano, Irak, Marruecos o China, entre otros paices. Aranda, que actualmente se encuentra en Túnez, trabaja hoy por hoy principalmente para The New York Times y El Magazine de La Vanguardia.
Fuente: diario El País (de Madrid) y El Universal (de México)