Hospedarse y comer en medio de la guerra

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Bengasi, 31 Mar (UYPRESS) – Todos los periodistas y co-rresponsales estamos invi-tados a escribir sobre nues-tras lejanas experiencias de buena vida. Este no es el mejor momento y lugar de mi vida. El Fadeel Hotel en la calle El Shat St. Giuliana en las afueras de esta ciudad. Es lo que había.
Para el estándar hotelero libio, aún en tiempos de paz, es de los mejores hoteles y de los peor ubicados para cubrir los acontecimientos. Todos los días tengo un lar-go recorrido para acercar-me a algunas de las sedes civiles y militares del Conse-jo Nacional, e incluso para tener acceso a Internet y poder transmitir.
En el estándar internacio-nal este es un hotel dos estrellas. Con generosidad. El restaurante si alguna vez

fue aceptable con su menú de sopas (jamahiriya) o sus carnes y pescados a la parri-lla se ha precipitado. Es el mejor hotel de la ciudad para gente sin ninguna exigen-cia, para viajeros internos o para una corresponsalía de guerra.
Como donde puedo, pero hay dos platos que pude resca-tar. Son un poco volátiles. El arroz con paloma, que aquí es muy popular y sabroso, y el Keshk de pollo. Es que las aves todavía se encuentran el mercado. El abastecimiento de la ciudad es cada día más escaso. El Keshk, es una especie de gulash de pollo una salsa de yogur, cebollas, ajo y cardamomo. A mi en por estos días me sabe a gloria.
UyPress Agencia Uruguaya de Noticias

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Liliana Castro Automóviles