“No recibimos ninguna llamada”
El Ingeniero Gabriel Gurméndez renunció recientemente a la presidencia de Antel para dedicarse de lleno a la precandidatura presidencial por el Partido Colorado. Este viernes vino finalmente a Salto tras un intento fallido el pasado 2 de diciembre pues estaba comprometida su presencia para participar del lanzamiento de la candidatura a la Intendencia de Salto de Marcelo Malaquina, que lo terminó poniendo en un entredicho con otros precandidatos de su partido que sostuvieron en dicho acto que habían recibido llamadas telefónicas dando a entender que los habían amenazado para no concurrir a nuestra ciudad. Sobre éste y otros temas que le preocupan de cara a la campaña electoral, EL PUEBLO dialogó con Gurméndez.
– ¿Por qué quiere ser Presidente de la República?
– Creo que yo puedo contribuir y aportar una experiencia en materia de visión del rumbo que debe seguir Uruguay, y que en función de mi recorrido por la vida tanto en el sector público como por el sector privado, puedo servir a construir un Uruguay mejor, que dé mejores oportunidades de trabajo y de vida a todos.
– ¿Cuáles son los principales aspectos que usted encararía siendo Presidente?
– Uruguay tiene una necesidad clara de dar un salto en materia del crecimiento económico, si el país se anima a hacer los cambios y transformaciones que se requieren en materia de reforma del Estado y de ser una economía realmente abierta y competitiva que ofrezca y pueda colocar el trabajo de los uruguayos en el mundo, puede colocarse en el pelotón de países de avanzada. Hay países similares a Uruguay que han logrado ofrecerles a sus habitantes esas mejores condiciones de un país desarrollado, y si Uruguay se anima a dar esos pasos en este sentido, podemos ofrecerles a los uruguayos estar en ese lugar.
– Hay una frase recurrente que establece que en Uruguay se cobran impuestos del primer mundo pero ofrece servicios del tercer mundo. ¿Cómo piensa que se puede revertir esa sensación que tiene la gente?
– Se actúa haciendo los cambios en las reglas de juego que permitan que el país sea mucho más competitivo. Pongo como ejemplo la reciente gestión que nos tocó a nosotros vivir en Antel. Cuando se hacen esos cambios, cuando se le da a la gente mayor libertad para elegir, cuando se genera mayor competencia, el resultado final es siempre un mejor servicio al cliente, mejores posibilidades y la reducción sustancial de precios. Me parece que ese es un ejemplo del camino que si Uruguay logra mejorar sus condiciones de competencia, no solo en el sector público sino también a veces quebrando situaciones de intereses corporativos, hasta en el sector privado, que van en contra del interés general, podemos dar un paso en ese sentido de ser más eficientes en la prestación de los servicios y en sus precios.
– Hay servicios que presta el Estado que son monopólicos, aunque siempre se recurre al ejemplo de la apertura del Banco de Seguros y de cómo logró ser competitivo, usted suma la experiencia de Antel en ese sentido, pero el resto de las empresas estatales, ¿pueden recorrer ese mismo camino y pelear de igual a igual con los privados como usted plantea?
– Siempre que existió ese nivel de apertura, el beneficiario final ha sido el cliente, el consumidor, pero además el propio país, porque se abarata, porque consigue mejores costos, y de esa manera proyecta mejor sus posibilidades de poder vender el trabajo de los uruguayos y de sus productos hacia afuera. En nuestra agenda, creemos que se debe avanzar a un ritmo más acelerado en estos cambios, y eso pasa, por ejemplo en materia de combustibles. Hemos propuesto que se avance en la liberalización al mismo tiempo de la importación de combustibles y en la cadena de distribución hasta la boca de expendio hacia el consumidor para conseguir las mejores condiciones de competitividad y beneficio para la gente.
– Estando hoy en Salto, que forma parte de esta región litoral y de la situación que vivimos por la economía de Argentina, podrá observar cómo se ha resentido aquí el comercio con la consiguiente pérdida de trabajo, ¿cuáles serían las medidas que usted aplicaría en esta zona en caso de ser Presidente?
– En estos últimos tiempos, afortunadamente se está dando que esa brecha se irá reduciendo en función de la situación de Argentina. Es decir, la coyuntura va a ir evolucionando favorablemente. Hay cosas que uno no va a poder controlar nunca, como son las economías de los países vecinos, sus tipos de cambio, ese tipo de movimientos cambiarios a veces exceden las posibilidades de un gobierno. La solución definitiva para que no existan estas brechas de precios entre Uruguay y estos países, pasa precisamente por abaratar el costo país. Es decir, vamos a resolver los problemas de diferencia de precios con nuestros vecinos en la medida en que ataquemos la cuestión que encarece los productos y los servicios de Uruguay, y eso tiene que ver con un Estado que es demasiado pesado, ineficiente, y que termina siendo un desincentivo para la producción, para el espíritu de emprendimiento y de iniciativa, y muchas veces incluso, para la inversión, que es el gran motor de crecimiento de la economía y de los empleos.
– ¿Usted se animaría a hacer una propuesta como precandidato presidencial de comprometerse a no aumentar los impuestos en el próximo quinquenio como ya hizo alguien?
– Esto siempre depende de las circunstancias económicas, pero en el contexto de atacar los temas que se deben atacar en materia de gasto del Estado y de reforma, creo que el esfuerzo tiene que venir mucho más por el lado del manejo de la gestión adecuada de los recursos públicos que por el lado de los impuestos. Estamos en un punto en que el nivel fiscal y tributario es un gran inhibidor del desarrollo de las posibilidades de Uruguay. Debe evitarse a toda costa, como lo hizo este gobierno en circunstancias tan difíciles como fue atravesar una pandemia o una sequía o una guerra, y un desvío del comercio hacia los países vecinos, me parece que se debe transitar por ese camino.
– Si se observa la rica historia del Partido Colorado podrá verse lo que significa tener esa vocación de gobierno y que hoy se encuentra relegado a ser un socio minoritario del Partido Nacional, ¿cómo se revierte esa situación electoralmente?
– Nosotros pretendemos que el Partido Colorado marque una impronta diferenciada, y en la medida en que sea capaz de ofrecerle a la ciudadanía un camino hacia adelante, sea capaz de poner al frente del partido un liderazgo confiable que aporte el rumbo correcto para el país y que la gente perciba que no solo tiene claro a dónde se va sino que tenemos las capacidades en la acción, es decir, de poder hacer las cosas, en lograr los resultados en función del conocimiento, de la experiencia, hay no solo colorados de hoy sino ciudadanos de todos los partidos que incluso vienen de otros lugares o que votan por primera vez, que pueden seguramente encontrar en el Partido Colorado ese liderazgo para decidir lo más importante que es confirmar el rumbo de Uruguay para las próximas administraciones y además acelerar el paso de las reformas.
– Usted fue protagonista de un hecho sin estar presente, porque tenía pensado venir a Salto el 2 de diciembre para el lanzamiento de la precandidatura a la Intendencia de Salto de Marcelo Malaquina, pero finalmente no vino. En el acto, los precandidatos Gustavo Zubía y Guzmán Acosta y Lara hicieron referencia a algunas llamadas amenazantes recibidas para advertirles que no vinieran a Salto, dando a entender que usted no vino por ese motivo, ¿por qué no vino?
– No pude venir a Salto por una situación estrictamente personal. Nuestros compañeros en la candidatura estuvieron acompañando el acto en primera línea. Además, nosotros públicamente felicitamos, alentamos y estamos muy contentos que Marcelo Malaquina, una nueva generación, tome la posta y tenga esta intención de trabajar por Salto. Nosotros estamos claramente identificados con una cantidad de personas que apoyan ese proyecto y nos hubiera gustado estar personalmente. Ese mismo día lo expresamos públicamente en un tuit, y naturalmente que nosotros no recibimos absolutamente ninguna llamada.
– ¿Cuál es su relación hoy con el senador Germán Coutinho?
– El Senador Germán Coutinho integra hoy una precandidatura a la Presidencia con Tabaré Viera, y nosotros estamos claramente en una situación de competencia y de diferencias respecto a esa posición política y respecto a la posición del Senador Germán Coutinho.
– La última palabra es suya…
– Somos sabedores de la difícil situación por la que está atravesando Salto en función de esta vecindad con esta situación tan terrible que se vive del lado de Argentina, aspiramos a que esto pueda resolverse en el tiempo en función de algunas expectativas que genera el cambio en el vecino país, y por supuesto que desde nuestra propuesta vamos a trabajar para proponer seguramente algún tipo de situación que permita, si esto transcurre durante nuestra administración, amortiguar estos efectos por lo menos en forma transitoria.
———————————————
PERFIL DE GABRIEL GURMÉNDEZ
Casado, tiene 3 hijos.
Es del signo de Cáncer.
De chiquito quería ser médico.
Es hincha de Nacional.
¿Alguna asignatura pendiente? Muchas en la vida.
¿Una comida? Los postres.
¿Un libro? 1984 de George Orwell.
¿Una película? La Naranja Mecánica.
¿Un hobby? No tiene.
¿Qué música escucha? Muy variada, desde el rock argentino, música clásica, polifonía.
¿Un día de la semana? Todos.
¿Qué le gusta de la gente? Me gusta encontrar en cada uno el atributo propio.
¿Qué no le gusta de la gente? El insulto.