El panorama económico de la divisional «B» es a todas luces complejo, porque el número de entradas vendidas y la recaudación en consecuencia, parte misma de la penumbra. En la décima fecha por ejemplo, la venta total de entradas fue de 649 y por todo concepto la recaudación situada en $ 126.950. Es del caso pasar revista al detalle.
ESTADIO HÉBER RACEDO
159 entradas y $ 31.400.
PARQUE HUMBERTO FORTI
176 entradas y $ 34.650.
CANCHA DE UNIVERSITARIO
314 entradas y $ 60.900.
El hecho es concreto y frente a situaciones como estas, la calculadora no miente. Los números ejercen su propia dictadura. En la décima fecha cada club de la principal divisional de ascenso, aportó promedialmente 54 entradas. No se alcanza en la B un piso básico de 100 entradas por club. Y solo basta tener en cuenta que el círculo propone la aparición este año de equipos con historia en el fútbol salteño, con los casos más notorios de Almagro, Sud América, Deportivo Artigas, Chaná, Progreso y Dublín Central. En el caso de Deportivo Artigas, sumando consagraciones como Campeón Salteño.
Sin embargo, la consecuencia entradas-recaudación está lejos de contemplar fines. Aunque en la Divisional B rige un pensamiento mayormente común a todos: «no nos queda otra y conformarnos con no perder plata». Por ahora la divisional no pierde, pero el hecho es que en algunos casos la ganancia resultó irrisoria.
En una fecha por ejemplo, cada club embolsó $ 2.500. Más crudo testimonio que ese, imposible.