Escribimos estas líneas de ex profeso cuando aún ignorábamos que sucedería con las gestiones de las principales autoridades departamentales, es decir intendente y legisladores en relación a la situación de EL PUEBLO.
Existe una gran expectativa, porque la cuestión no es fácil, aunque en otros casos hemos visto como se solucionaba con facilidad.
Es que la situación de EL PUEBLO no sólo es una fuente de trabajo como las hay otras en el departamento que atraviesan dificultades, sino que es un medio de comunicación social privado y esto determina que no se trata sólo del trabajo de un grupo de gente, entre periodistas, revendedores y demás, sino de un elemento fundamental en la vida ciudadana.
Sea cual sea el resultado de estas gestiones, estamos convencidos que EL PUEBLO seguirá estando en las calles de Salto por la sencilla razón de que siempre permanecerá en la voz de quienes le fundaron y quienes saben valorar la justicia social.
EL PUEBLO ha dado muestras fehacientes de que no sólo cumple su rol de informar y formar opinión, sino de hurgar y profundizar elementos que lleven a la verdad, tantas veces oculta o manejada por oscuros intereses, que no siempre son visibles a simple vista.
Muchos de los que lo han combatido en épocas anteriores, se alinean hoy en esta lucha por la permanencia y eso nos reconforta.
EL PUEBLO es y será siempre la voz de todo el necesitado. Se prestará para cualquier campaña de solidaridad del coterráneo que la necesite.
Todo el salteño y el poblador de esta región, que haya recurrido a este diario lo sabe. Siempre se encuentra una salida para el problema que sea y siempre estará disponible con la más amplia disposición.
Porque somos salteños.
Porque nadie mejor que EL PUEBLO conoce la temática local.
Porque siempre hemos tratado de conocer la verdad o aportar los elementos necesarios para aproximarnos lo más que se pueda a ella.
Porque nunca nos hemos negado a publicar una opinión o una posición, por más que no la compartamos.
Porque creemos que la democracia se funda sobre la diversidad de opiniones.
Porque no nos creemos los dueños de la verdad.
Aquí estamos y aquí seguiremos.
Alberto Rodríguez Díaz
