La Constitución de la República establece que los ediles o “miembros de las juntas departamentales” como se los denomina en el texto legal, son “honorarios” y aunque se le quiera buscar otra acepción, esto significa que el ejercicio del cargo no tiene beneficio económico alguno, sino el “honor” de quienes los desempeñan.
Pues bien, nos gustaría saber entonces ¿por qué hay tanto interés en estos cargos? Lo sucedido en Salto Grande, con el total de la Cámara Baja opuesta a la medida es un ejemplo.
Pero no nos quedamos en Salto Grande, porque aquello de que los pueblos tienen los gobiernos que se merecen no fue nunca mejor aplicado. Es que pocos ciudadanos hoy votan por convicción o por ideas, sino que lo hacen por amiguismo, esperando ser retribuidos por el político al que vota.
No oyó hablar acaso de los “pases en Comisión”. Significa que el funcionario de otro organismo del Estado, puede pasar a ser edil. En buen romance significa que sigue cobrando el sueldo, pero presta funciones en la Junta Departamental, adonde nonconcurre casi nunca o a lo sumo “trabaja” un par de días a la smenaa. Un excelente “negocio” ¿verdad?
No oyó hablar acaso de vales de nafta, de exoneración de Patente de Rodado y de Contribución Inmobiliaria (dispuestas por ley), de reposición de gastos. No oyó hablar de celulares gratuitos, de P.C. baratas?
Este “sueldo encubierto” que se cobra legalmente que va desde 20 mil pesos mensuales hasta los 160.000 en algunos casos.
Puede entenderse que no hay derecho de que se pretenda que los ediles paguen para trabajar. Pero si hacen algo o no es harina de otro costal, hay casos y casos. A fuer de ser sinceros hay que decir que hay casos en que no se cobra nada y casos en que se cobra “algo”.
La cuestión es saber si estamos en el camino correcto. La función del legislativo departamental es importante. Tanto es así que integra el gobierno departamental, pero realmente cumple la función dispuesta por la Constitución de la República o se transforma en un órgano politiquero, que solo levanta la mano cuando las iniciativas vienen del oficialismo y la bajan, esconden o “se van” cuando vienen de la oposición?
Hemos escuchado muchas veces el término “caja de resonancia”, pero de ¿qué problemas? Primero se miran quien lo plantea y si sirve o no a nuestros intereses partidarios.
A.R.D.