Ocurrió el 2 de julio del año 2010, cuando Uruguay batió a Ghana en la tanda de penales, en el marco del Campeonato Mundial de Sudáfrica. El expediente pasó a la historia, porque el salteño Luis Suárez rechazó la pelota con la mano cuando el gol era inminente y que hubiese determinado la eliminación «charrúa». A Suárez le costó la expulsión.
El penal malogrado por los africanos, hasta que el juego se definiría por la tanda de penales. Sebastián Abreu fue el último ejecutante «picando» la pelota frente al golero Richard Kingson.
Es verdad que el delantero minuano se metió en la historia con ese penal convertido, porque implicó el pasaje de Uruguay a semifinales, una situación de hecho que no se verificaba desde el Campeonato Mundial de 1970 en México

Semanas atrás desde EL PUEBLO, el manejo de la posibilidad: que por primera vez en un partido oficial, Abreu podría jugar en el Parque Dickinson, si es que Salto y Lavalleja se enfrentaban en Cuartos de Final. Salto fue Campeón del Litoral Norte y Lavalleja vice campeón del Este.
A los 47 años, Abreu integra la selección que orienta Pablo Almandos y el sábado será uno más en el estadio. En el juego de ida no supo de minutos, pero a poco que se tenga en cuenta la calidad de partido decisivo, no sería de extrañar que Abreu sepa de acción: entrar y jugar.
