Patricio Ramón Vinci Iribarne, joven salteño, acaba de culminar una etapa clave en su vida: obtuvo el título de Máster Universitario en Tecnologías del Marketing y Comunicación Política en la prestigiosa Universidad de Santiago de Compostela, en España, con mención honorífica y promedio sobresaliente (9/10).
Detrás de este logro hay una historia de compromiso, curiosidad y pasión por el conocimiento. Radicado en la ciudad gallega de Santiago de Compostela, una ciudad con alma medieval y corazón universitario, Patricio se sumergió no solo en el estudio, sino en la vida cultural, social y natural del lugar.
La capital gallega es mucho más que el destino final del famoso Camino de Santiago.
Es un centro vital de la cultura gallega, donde se habla gallego casi tanto como castellano, y donde la universidad —fundada en 1495— marca el ritmo de la ciudad. Allí, Patricio no solo estudió, también participó de actividades deportivas (natación, tenis, running, fútbol, golf, senderismo) y recorrió Galicia durante la primavera, conociendo sus pueblos y disfrutando de las típicas verbenas, fiestas populares llenas de música y gastronomía.
El máster que realizó es altamente especializado. Lejos de limitarse a la comunicación política tradicional, forma profesionales capaces de liderar campañas desde un enfoque estratégico y tecnológico.
Patricio, además, realizó un curso de observación astronómica y, gracias a su desempeño, fue invitado por el director del observatorio de la universidad a redactar artículos científicos sobre astronomía.
Actualmente trabaja en su tesis final, en la que aplica herramientas de neurociencia al análisis de los carteles electorales uruguayos, con especial atención a la simbología y la imagen de los candidatos. Como parte de sus prácticas, colabora con el grupo parlamentario del Partido Popular de Galicia, redactando proyectos de ley, aportando a la comunicación política y participando activamente en el trabajo legislativo.
Una experiencia enriquecedora que mezcla lo académico con lo humano, lo científico con lo cultural. Patricio Vinci no solo llevó el nombre de Salto a Europa; también construyó un puente entre realidades, saberes y territorios.