Daniel Noé García Acosta, una historia de superación personal
Me permito hablar en primer persona y empezar con una reflexión personal: en los 22 años que me he dedicado a la docencia, es evidente que tuve alumnos de las más diversas características; pero cuando pienso en un símbolo de humildad, sacrificio, esfuerzo y excelencia académica, pienso en Daniel García. Empezó el liceo con 30 años de edad, Nocturno por supuesto, las limitaciones económicas en su casa no faltaban, pero él no perdía de vista su meta: estudiar y superarse. Hoy es Pianista, Docente del Conservatorio Dptal. de Música, además de egresado de la UDELAR como Técnico en Interpretación (opción Piano) y estudia Teología.

1-Te recuerdo como un excelente alumno del Nocturno, hablemos de eso…
Sí, el liceo lo hice en el Nocturno (Liceo 5). Anteriormente no había podido hacerlo. Empecé a los 30 años, me gustó, lamento no haberlo hecho antes, pero de todas maneras pude cursar todo el liceo. Recuerdo que cursé 1er. año y a fin de año, como adelanto, di todas las materias de 2do. en exámenes libres. Así que de 1ro. pasé a 3ro. En 3ro. justamente fue que tuve clases de Literatura contigo, Jorge. Cursé ese año y también como adelanto di la mitad de las materias de 4to. ese mismo año. Al año siguiente cursé las cuatro materias que me quedaban de 4to. y después hice 5to. y 6to. de Arte y Comunicación en el IPOLL.
2-¿Qué recordás de esa época liceal?
Fue un tiempo muy lindo. Yo le ponía ganas, le ponía entusiasmo al estudio y por sobre todas las cosas respeto por los profesores. Siempre tuve presente eso, que los profesores del Nocturno generalmente trabajan también en el día, por un tema económico evidentemente, y a la noche ya están cansados, entonces entiendo que no están para estar aguantando gente desmotivada, que no estudia, que no cumple los requisitos para el Nocturno. Entonces, considerando esa situación de los mismos profesores, siempre tuve respeto hacia ellos, estudiaba y dejaba lo mejor de mí. Incluso en el Nocturno colaboré también con alumnos del CERP, que necesitaban hacer una presentación, la hicimos en el liceo, yo tocando el piano y además escribí una obra de teatro que la representamos entre ellos y algunos alumnos del liceo también. Fue algo muy lindo. “Vistiendo a un adolescente” se llamó la obra.
3-Mencionaste el piano, ¿cómo ha sido tu formación en música?
Recuerdo que hice el Conservatorio en 3 años; se hacía en 6 y yo lo hice en 3 con mucho trabajo y esfuerzo pero con mucho entusiasmo y muchas ganas. Al terminar esa carrera, el hecho de no tener prácticamente nada de liceo, eso me trancaba también para continuar estudios superiores. Yo sentía la necesidad de seguir estudiando…Pero yendo a tu pregunta, mi formación en música comienza más o menos a los 27 años, tenía un órgano y ahí comencé a estudiar, con motivo también de poder tocar los himnos en la Iglesia. Así comencé, con un órgano, después me inscribí en el Conservatorio, donde tuve dos excelentes profesores: Antonio López, que hoy ya no está más en este mundo, fue mi profesor de Teoría y Solfeo, era profesor de guitarra y en el liceo de Literatura, excelente, muy excelente como profesor y como persona; y el otro fue Sergio Mena, hoy Director de la Banda y Orquesta Departamental de Salto, que está funcionando muy bien y él la dirige de manera excelente. Como te contaba, cursé el Conservatorio en 3 años, tanto en la parte de Piano con la profesora Beatriz Volpi, como en Teoría y Solfeo con los profesores López, Mena y Alberto Chiriff.
4- Y después viene la formación universitaria…
Tenía 30 años cuando terminé la carrera en el Conservatorio de Música, en aquel entonces era Conservatorio Municipal, hoy se llama Conservatorio Departamental de Música Mtro. Bautista Peruchena, donde además hace 16 años que trabajo. Hace 17 años que soy funcionario de la Intendencia y 16 que llevo como docente en el Conservatorio. Después de terminar el liceo pude ingresar a trabajar en el Conservatorio. Para ese entonces yo estaba trabajando en otro sector, en Contralor, y más o menos a los 40 años empecé también la Escuela Universitaria de Música acá en Salto, en la Universidad de la República, hoy Facultad de Artes porque hay un convenio con la Facultad de Montevideo. Tuve también un pasaje muy lindo por la Universidad. Hice una Tecnicatura que se hace en 4 años, yo la hice en un poco más de tiempo, por estar ya un poco grande, trabajando y casado, pero pude terminarla muy bien. Allí tuve como profesora de piano a Carmen Navarro, excelente concertista, y también al profesor Miguel Lecueder, muy excelente concertista también con el que mantengo al igual que con Carmen una muy buena amistad. También en la Universidad pude estudiar teoría, la materia se llama Lectoescritura, además Historia de la Música, Práctica Coral y Taller de Análisis. Egresé de allí; creo que en el mundo en que vivimos es muy importante tener un diploma, un título que avale, más allá de la experiencia que por supuesto es muy necesaria y que a veces es hasta más importante, pero un título también es necesario.
5- Hablaste de la Iglesia, sé que ocupa buena parte de tu tiempo, ¿cuáles son tus actividades hoy en día?
Además de las clases en el Conservatorio, donde soy profesor de Piano y Lectoescritura, sigo yendo a la Iglesia Evangélica, voy a la Iglesia Bautista Fundamental, ubicada en Barbieri 1570, donde también funciona la Iglesia Biblia Abierta. Pero yo pertenezco a la Iglesia Bautista Fundamental. Colaboro con el pastor, con la música en el piano, y también soy predicador. Así que estoy en distintas actividades como salir a repartir folletos e invitar a las personas. He ido a campamentos, a retiros, a encuentros, he viajado bastante también por temas de la iglesia: Buenos Aires, Monte Casero, Paso de los Libres, Uruguayana, Rivera, Colonia, Montevideo, Paysandú… Tengo una buena relación con pastores de otros lugares. Actualmente también estudio Teología, acá en Uruguay y a la vez en línea en Argentina y Estados Unidos. Tengo una rutina diaria de levantarme a las 6.30 de la mañana para que podamos desayunar, después llevo a Darío al jardín y a mediodía lo voy a buscar; también de mañana llevo a mi esposa a trabajar a la escuela, que por este mes está ocupando la Dirección de la Escuela 81, le llegó sorpresivamente ese ofrecimiento aunque es efectiva hace años, y bueno, puede haber o no posibilidad de continuar en ese cargo. Estamos muy contentos en cuanto nos hemos organizado en estas cosas, estamos muy bien gracias a Dios.
6- Momento de hablar de la familia entonces…
Gracias a Dios soy padre, con mi esposa Gaby tenemos a Darío. Él vino a nuestras vidas cuando tenía cinco meses y medio y ya es casi nuestro, estamos haciendo los trámites finales para que pueda recibir nuestros apellidos. Hoy tiene dos años y estamos muy felices de tenerlo con nosotros. Hemos trabajado bastante para poder tener a Darío y ha cambiado nuestras vidas, nuestra manera de ver las cosas, nuestro vivir diario, nuestro matrimonio, ha cambiado toda nuestra vida en todos los aspectos.
7- ¿De tu propia infancia qué recuerdos tenés?
Te puedo contar que nací el 8 de julio de 1971. Ayer estaba mirando que fue un jueves. Mi madre tenía 41 años, mi padre 50. Había que hacerle una operación a mi madre o tener un hijo, prefirieron tener un hijo, y fui el último de 9 hermanos. Hasta la fecha de casarnos con mi esposa, Gabriela Camargo, que fue el 27 de julio de 2012, viví en calle Zorrilla entre 19 de Abril y Agraciada. Estuve viviendo ahí 41 años, donde nacieron mis últimos tres hermanos. Siempre fui un poco quieto, a nivel familiar, no salíamos mucho… Pero muy travieso en el barrio sí, con la patineta, con ir a pescar muy contra la voluntad de mi madre también que me cuidaba mucho. Pero como todo niño y todo adolescente me gustaba hacer mis travesuras…Creo además que resulta necesario para el desarrollo de la persona. Otra cosa para contar es que a los 13 años comencé a ir a la Iglesia, donde no he dejado de ir hasta ahora. Cursé todos los años en la Escuela N° 4, de Jardinera a 6to.
8-Alguna vez hablamos que no fueron años nada sencillos en lo económico; ¿sentís que tu vida es una historia de superación?
Sí, siento que es de superación a varios niveles. No quiero incomodar a nadie al decir esto, no quiero tener excesivo orgullo de vanagloria pero sí, mi vida ha sido una vida de superación. Nuestra economía, digo la de mi familia siendo yo niño, no era nada buena…En casa solamente trabajaba mi padre, mi madre era ama de casa, cuidaba a mis hermanos. Los sueldos no eran buenos… Y con trabajo, estudio y esfuerzo, hoy tenemos una vivienda nuestra acá en barrio Los Laureles, gracias a Dios hemos podido acceder también a comprar un auto que nos ha venido muy bien para nuestras actividades laborales y más ahora con Darío. También a nivel intelectual creo que he logrado crecer, desarrollarme como persona, como vecino, como quien a su vez puede ayudar a otros también y no quedarme con lo que sé guardado para mí. Como dice el pastor de la iglesia: no se trata solo de hinchar la cabeza de conocimientos, sino lo que uno sabe volcarlo a la vida de otros, para su beneficio. También está aquello de que uno crece y multiplica conocimiento en la medida que da a los demás.
9- Sos además alguien que no deja de estudiar…
Sí, tengo muchos cursos hechos, en Música y en Educación, en Uruguay y en otros lados, he realizado algunos estudios en Europa incluso. Es algo que me gusta, realmente me gusta estudiar. Desde que le tomé el gusto en el liceo no he parado de estudiar. Aunque no terminé tengo algunas materias aprobadas también en el CERP.
10- Me dijiste una vez, que en tu familia ya son pocos en Salto, ¿cómo es eso?
Sí, es verdad. Tengo hermanos en Maldonado y en Buenos Aires, y tengo sobrinas en México también. Acá en Salto tenemos la familia de mi esposa…