Cuando Angelina Bazzano asumió este 8 de mayo como Secretaria de la Delegación Uruguaya ante la Comisión Técnico Mixta de Salto Grande, se constituyó en la primera mujer que ocupaba dicho cargo. El diálogo con ella comenzó recordando aquellos primeros pasos que dio profesionalmente desde la Fundación Salto Grande.
1. ¿Su relación profesional con Salto Grande comenzó con la Fundación?
– La verdad que sí. Cuando me vine a Salto en 2011, dejé mi currículum en el Centro Comercial. Su gerente, Martín (Apatie), se lo acercó a Andrés (de la Iglesia) porque estaban buscando una contadora. No conocía a la Delegación de Uruguay de ese momento, me entrevistaron y me dijeron “vas a ser la contadora”. Me comentaron la filosofía de la Fundación. Recuerdo que por mandato de Tabaré Vázquez en su primer gobierno les dijo de equiparar los sueldos de los Delegados a los de un director de UTE, y la diferencia ponerla en una cajita, esa cajita terminó siendo la Fundación, que se consolidó en 2009. Ellos iban llevando todo en Excel, me dieron todos los papeles y me dijeron, “ayudanos a ordenar esto”, y así empecé en 2011. Empezamos a hacer llamados, a plantear convocatorias, así fuimos armando todo y creciendo. Más allá de lo anecdótico, quedó consolidada como una política de Estado, que también ahora estamos volviendo con ese concepto con Casaravilla para que quede inserta en la sociedad.
2. Cambió su rol, ahora es Secretaria de la Delegación Uruguaya ante la CTM.
– Exactamente. La primera mujer que ocupa ese cargo de Secretaria de la Delegación de Uruguay. Es un honor. Me gusta la gestión y trabajar con la gente, para la gente. Y después que uno está, piensa que si está bien para la sociedad, no hay que entrar en rispideces. Si podemos hacer algo bien, ¿cuál es el punto de inflexión en el cual podemos negociar y seguir adelante y trabajar sin bardear proyectos porque los impulsó alguien de otro pelo político?
3. ¿Cómo se enteró de su nombramiento?
– Me levanto a las seis de la mañana y tengo un mensaje, “Casaravilla se quiere reunir con vos hoy en el hotel. Pasanos tu currículum”. Pasé mi currículum y me reuní con él a las nueve. Me dice que quería conocerme porque los otros Delegados ya me conocían. “Si vos me decís que sí, ya lo traslado a la CTM y ya te designamos”. A las dos era el acto público de la asunción cuando vino el Presidente Orsi, ese mismo día me llamó. No lo pude consultar con mi familia. Era decirle en ese momento sí o no. Y bueno, me la jugué. A las dos fui al acto de asunción, pero nunca pensé que en el acto cuando asumió diría que una de las primeras resoluciones era nombrar a la Secretaria, “Angelina, ¿estás por acá?” (risas) Yo estaba sentadita en el fondo. Una cantidad de mujeres que no conocía me felicitaron, “nos alegramos que seas mujer”. Y realmente, Salto Grande tiene solo un 17% de mujeres.
4. ¿Cómo fue el comienzo del trabajo de la Delegación Uruguaya en este período?
– Lo que hicimos fue organizarnos, planificar y tener una hoja de ruta que nos marque cuáles van a ser nuestros pilares fundamentales de la gestión y cómo vamos a gestionar la responsabilidad social de la región, que claramente es algo bien necesario, y que los salteños siempre están un poco mirando Salto Grande. Estamos en esa planificación, la idea es presentarla públicamente probablemente en octubre.
5. ¿Cierran Energimundo?
– No, ¿cómo vamos a cerrarlo? Energimundo fue un proyecto que quedó en la Delegación anterior, que se terminó la infraestructura, empezar a gestionarlo y a trabajarlo. Al finalizar la Delegación anterior lo que hizo fue un acuerdo con LATU, que con su experiencia en espacio-ciencia, gestionara Energimundo, que empezó en febrero de este año. Nosotros consideramos que ese plan piloto fue algo inicial, o sea, ya estaba como para terminarlo y nosotros hacernos cargo, porque entendemos que tenemos el capital humano de Relaciones Públicas. Latu había contratado un equipo de guías, y lo que hicimos es que ese equipo pase a Fundación Salto Grande, se lo puso en su plantilla de trabajo, pero la gestión y la comunicación es directa con Relaciones Públicas y con el área de Secretaría de la Delegación. Esto fue ahora, cerramos el acuerdo de rescisión con LATU el 1° de setiembre.
Ahora está Nicolás Jardim, quien está en contacto directo con el equipo de guías y a su vez con gente de Relaciones Públicas, estamos generando los recorridos, pensando cómo vamos a poder abrir al público y hacer ciertos talleres ahora en setiembre. En julio hicimos una experiencia de abrirlo más a la comunidad, en setiembre vamos a hacer lo mismo con algunos talleres. Además hay todo un espacio artístico con un escenario, hay un parque. Se está haciendo mucho con las escuelas que hacen el combo con la visita a la represa. Ahora invitamos a que cualquier salteño pueda ir, te agendas y vas y en setiembre, cuando hayan más propuestas de talleres, con cosas de robótica y de tecnología.
6. ¿Qué otras cosas pasan por la Secretaría?
– Soy la Secretaria de los tres Delegados de Uruguay, tenemos un equipo bien sólido, nos comentamos todo, eso nos fortalece muchísimo por el buen equipo que hicimos. Entonces, por un lado está toda la parte de la CTM, que una vez al mes hay reunión plenaria de los Delegados uruguayos y argentinos con todo un temario extenso de temas que son del complejo en sí. Entonces estamos organizando todos esos temas y viendo los asuntos e informándonos al respecto de eso. Esa es una tarea que te lleva bastante tiempo.
7. ¿Cómo se hace en los temas de funcionamiento de la represa?
– Hay cosas que en realidad son menores y casi rutinarias que se resuelve a la interna de cada gerencia, pero hay temas que se tienen que resolver en conjunto con Argentina. Ahora está la renovación de Salto Grande, que eso es uno de los temas que con Casaravilla planteamos como una política de Estado. Es muy importante la represa porque representa el 30% de la energía del país. Y la represa ya está en tiempo de cambiar, está inmersa desde 2019 en este plan de renovación y hay que seguir adelante. La verdad que tuvo un atraso de dos o tres años en el periodo anterior de ejecución, porque para eso hay que contratar nuevos técnicos, hay que pensar en nuevos contratos, presupuestos. Para eso hay un préstamo del BID. Estamos interiorizándonos en todo para gestionarlo de la mejor forma y que en realidad se den pasos hacia adelante y que no se retrase ni un día más lo que es la renovación de Salto Grande.
8. ¿Ese proyecto de renovación de la represa incluye trabajar en la erosión de la costa?
– Sí, ya se venía trabajando en eso. Lo que podemos anunciar que la siguiente etapa, la segunda, será sobre la desembocadura del San Antonio, que está bastante venida a menos.
9. ¿Cómo se piensa trabajar en relación a la región?

– Otro tiempo de trabajo de la Delegación es justamente con la localidad, con las instituciones regionales, que tiene que ver con cómo se usa, cómo trabajamos y gestionamos la responsabilidad social de Salto Grande. Para eso hay muchas solicitudes. Lo que estamos viendo ahora es ver cómo ordenar eso porque tenemos cartas de solicitudes desde una escuela hasta una organización de un evento. Estamos buscando la manera de que ingresen de forma más transparente. No queremos tener una postura paternalista, como diciendo, “pedime y vemos”. Esa no es la visión que queremos construir. Trabajemos en conjunto y dejemos a los que saben. Si es un tema social, está el Ministerio de Desarrollo Social, bueno, apoyemos a las instituciones que saben hacer eso y que nos digan dónde está la prioridad. Y no salir a apoyar a algo que capaz pensamos que está bueno, pero que hay un proyecto en otro lugar.
10. ¿Qué utilidad le darán a la sede que tienen en la ciudad?
– Vamos a mantener la oficina del centro, pero no con oficinas donde esté alguien todos los días, sino que lo estamos usando básicamente para los días viernes, para recibir a instituciones que nos quiera plantear un proyecto, o para dialogar e intercambiar sobre lo que están trabajando. Los agendamos y vamos con el vicepresidente Urrutia y con el Delegado Machado a esas reuniones.









