Hace prácticamente un mes escribíamos una opinión similar a la que hoy emprendemos desde EL PUEBLO referidas esta medianoche al inicio de la veda electoral. Pero para no repetir la liturgia republicana, permítaseme establecer que en esta oportunidad habrá menos para pensar al ciudadano que concurrirá este domingo a votar, porque en lugar de encontrarse con 89 listas más dos papeletas como se encontró al ingresar al cuarto secreto de su circuito en octubre, ahora habrán apenas dos listas del mismo color gris, pero con la foto de dos personas cada una, que son las fórmulas presidenciales.
Esta vez la tómbola se juega a ganador con solo dos números o listas, hasta la penca que pueda hacerse para saber quién gana sería aburrida por tener exactamente las mismas probabilidades tanto una fórmula como la otra. Así que nada, ni de suerte, ni de tirar la moneda sino que ahora sí, frente a frente con la verdad.
Si durante estos cinco años se ha sentido seguro, atendido y contemplado como es debido en todos los aspectos por el actual gobierno, tendría que votar por la fórmula de Álvaro Delgado y Valeria Ripoll como un apoyo a la actual gestión con la esperanza que se cumplan las promesas de campaña.
Ahora bien, si en verdad piensa todo lo contrario y que estos no fueron los famosos cinco mejores años de su vida como le prometieron, la opción también es simple pues será la otra fórmula la que deberá votar, la de Yamandú Orsi y Carolina Cosse. Es sencillo, como dice el título…
