La presidenta del Banco de Previsión Social (BPS), Jimena Pardo, se refirió a la situación de los usuarios de Pueblo Fernández, luego del reclamo público planteado por el diputado Horacio de Brum.
En ese marco, la jerarca sostuvo que el organismo está cumpliendo con el convenio firmado y que la atención que se brinda mantiene los mismos estándares de calidad, independientemente de la oficina desde donde se realice.
En dialogo con EL PUEBLO explicó los argumentos por los cuales la población del municipio de Mataojo es atendida por personal de Tranqueras.
“Ese convenio tiene ya unos cuantos años. El compromiso se había firmado con la alcaldesa de la época y establecía que el municipio trasladaba a los funcionarios del BPS”, explicó Pardo, señalando además que la realidad geográfica de la zona influye directamente en la organización del servicio. “Pueblo Fernández queda por una carretera que está en bastantes malas condiciones, más lejos de Salto que de Tranqueras, y de hecho el propio municipio lleva a la gente a Tranqueras”, detalló.
En ese sentido, la presidenta del BPS afirmó que el acuerdo se está cumpliendo, aunque con una modalidad ajustada a la demanda real. “Se está atendiendo cada dos meses porque no había demanda suficiente para una atención mensual, que era lo que estaba pactado originalmente”, indicó. Precisó que en julio la atención se realizó con funcionarios de Salto y que desde septiembre se lleva adelante con personal de Tranqueras.
Pardo fue firme al descartar diferencias en la calidad del servicio. “No hay una diferencia de información dependiendo de dónde vaya el funcionario. Cualquier funcionario del BPS está capacitado para hacer jubilaciones, pensiones por invalidez o cualquier trámite en las mismas condiciones”, subrayó. Agregó que muchos habitantes de la localidad ya se trasladan habitualmente a Tranqueras por razones de cercanía.
Otro de los puntos aclarados tuvo que ver con la deslocalización de los trámites. “El trámite lo inicia cualquier funcionario del BPS y se puede hacer en forma deslocalizada. No importa si lo hace un funcionario de Salto o de Tranqueras”, afirmó. Incluso destacó que, con el nuevo sistema implementado desde julio, “si una persona ya cumple los requisitos para jubilarse, la jubilación se le da casi en el momento”.
Respecto a la percepción de que los trámites “no quedan en Salto”, Pardo recordó que esa situación es habitual. “Hoy hay trámites de Salto que no quedan en Salto, porque se estudian en equipos que no están localizados en un solo lugar”, explicó, asegurando que eso no afecta las garantías del proceso.
Giras de pago
La presidenta del BPS también abordó los cambios en las giras de pago en el interior, un tema que genera preocupación en varias localidades. Señaló que la decisión de retirar los pagos por parte de funcionaros responde principalmente a razones de seguridad.
«Nosotros teníamos en todo el interior unas 7 zonas donde existía lo que se llama la gira de pago, todavía existe en realidad. Allí en Salto la que es más grande y la que estamos discontinuando, porque tiene un cajero del Brou, es en la localidad de Belén, que es una gira de pago grande, son 160 recibos. Pero acá la situación que nosotros tenemos que atender y que es la que nos importa más a la fecha es que hay una nueva reglamentación del Ministerio del Interior para la cual nosotros pedimos una prórroga, pero hay temas de seguridad acá». Aclaró que el tema sobre todo de seguridad, no solo es por los funcionarios del BPS sino de las propias personas que cobran, «que hacen que el directorio del BPS tenga que tomar esta resolución en función de, de nuevo, atender la seguridad de las personas.»
Indicó que se trata de localidades que cuentan con cajeros automáticos o redes de cobranza, y recordó antecedentes similares. “En Constitución se retiró una gira de pago mucho más grande en 2022, al principio hubo molestias, pero después la cosa fluyó”, afirmó. Añadió que el proceso se está comunicando con anticipación y de forma gradual.
Finalmente, Pardo adelantó las prioridades del organismo de cara a 2026. “Queremos reducir los tiempos de espera, simplificar los trámites y acercarnos más a las personas, especialmente en el interior, con un lenguaje más claro y empático”, concluyó.






