Historia del turismo en Paysandú última parte
Como hemos visto a lo largo de este artículo, el desarrollo turístico de Paysandú ha tenido su mayor impulso en el producto termal y Paysandú ciudad. Fue recién en el periodo 2015-2020
cuando comenzó a trabajarse desde lo institucional (Dirección de Turismo) a través de
proyectos -que contaron con apoyo económico de la OPP- en otras localidades del interior
nunca antes incluidas en la promoción turística. En este sentido es importante destacar el proyecto «La Estación más linda del país» en Lorenzo Geyres y el proyecto «Rescatando la identidad de Piñera Beisso», que implicaron en ambos casos un proceso de trabajo articulado entre actores públicos y las comunidades locales con las que se trabajó en torno a riquezas culturales y paisajísticas de sus pueblos con la finalidad
de integrarlas a distintas rutas turísticas.
En el caso de Queguay, vinculado a la ruta termal (Paysandú, Guaviyú y Salto). Mientras que a Piñera-Beisso se lo integró al circuito Guichón, Almirón y Montes del Queguay. Además se concretó la creación del primer escenario para espectáculos al aire libre y se inauguró la primera fiesta del pueblo denominada «La vuelta al pago».
Se potenció también la promoción de la oferta de Guichón generando también eventos y promociones sobre lugares que antes no habían sido difundidos, como los palmares, los menhires y las actividades de aventura en el río Queguay (canotaje y flotadas).
En Pueblo Esperanza se estrenó (con buen resultado) el circuito «Tierra de Esperanza» con pobladores locales actuando de guías. Dicha propuesta contó con asesoramiento técnico de la Dirección de Turismo y hoy se ofrece a través de agencias de viajes sanduceras que a partir de la pandemia están promocionando paquetes con atractivos locales que se venden básicamente a público sanducero.
Durante el periodo 2015-2020, otra cuestión no menor, fue la fuerte presencia que Paysandú adquirió en guías turísticas y otras publicaciones nacionales e internacionales.
En el primer caso, con completa información que abarca a todo el departamento en la guía Pasaporte, la
guía En Foco y el portal del MINTUR. Pero también ganando presencia en medios
internacionales importantes como la revista Weekend y Página 12, a partir de instancias (viajes de familiarización con prensa) que en su momento organizaron la Dirección de Turismo y el MINTUR.
Mucho potencial, poca creatividad e inversión privada.
Desde el punto de vista de las experiencias turísticas, debemos decir que ha habido poca capacidad para emprender ofertas que permitan desarrollar el gran potencial que Paysandú tiene, particularmente relacionado al patrimonio histórico y acervo cultural. Una experiencia que resultó innovadora en su momento fue la aparición del Camino de Leandro Gómez, en 2014. Un recorrido guiado por lugares emblemáticos de la Defensa que se sigue realizando de manera ininterrumpida desde ese entonces.
Si bien se han realizado valiosas investigaciones sobre el patrimonio histórico y cultural de Paysandú, no ha habido capacidad de emprender servicios turísticos que puedan significar al menos una herramienta económica complementaria para ciudadanos sanduceros.
Todavía hoy hay los que siguen soñando con volver al pasado glorioso industrial, lo que en muchos casos implica un estancamiento respecto a pensar en otras posibilidades para desarrollar en estas tierras.
Lo cierto es que en materia de potencial turístico, Paysandú tiene derecho a soñar en grande.
Quizá solo sea cuestión de hacer más y hablar menos, porque lo cierto es que aquí hay riquezas históricas, naturales y culturales que requieren creatividad e inversión para ser explotadas turísticamente.
Cuando uno repasa en líneas generales la historia del turismo en Paysandú, con luces y
sombras, debemos decir que el desarrollo del sector se ha dado mayormente gracias al
esfuerzo de gobiernos de turnos (tanto nacionales como departamentales).
Hoy también siguen habiendo sanduceros que comparan la pobreza turística de Paysandú respecto al desarrollo de Colón, que incluso cuenta con mucho menos potencial (pero tiene amplios y variados servicios). En la ciudad vecina hace más de 30 años apuestan al turismo y -a diferencia de Paysandú- el sector privado ha sido pieza clave para que ello ocurra, siendo creativo y apostando a la inversión logrando así que el turismo se haya convertido en el motor principal que mueve a dicha comunidad.
El Corredor fue una apuesta conjunta impulsada junto al MINTUR y los gobiernos de Artigas, Salto, Soriano, Río Negro y Colonia cuyos esfuerzos se volcaron a la promoción turística regional, en una búsqueda de generar complementariedad a las ofertas de cada departamento, unificando criterios en la difusión de destinos.
También implicó una importante apuesta a la generación de nuevas infraestructuras tales como Centro de Visitantes y Centros de Interpretación, que en el caso de Paysandú abarcaron a la Meseta de Artigas y Montes del Queguay.
Lamentablemente, pese a los buenos resultados y a que el Corredor contaba con la
participación de más de 230 operadores de toda la región, las actuales autoridades MINTUR decidieron dejarlo de lado.
Durante este periodo, también se estableció un acuerdo de trabajo integrado en materia de turismo y cultura con la municipalidad de Colón, que para el turismo sanducero significó mejorar y aumentar la promoción de Paysandú del lado argentino (presencia permanente de folletería en oficinas de Colón e instancias de familiarización turística en Paysandú con
informantes turísticos de aquella ciudad).
Guaviyú: termas pioneras de Paysandú Quintana ha realizado un detallado análisis de la evolución de la planificación de políticas turísticas ligadas específicamente al turismo termal y señala que entre mediados de los ´70 y década del ´80, se realizaron diversos estudios donde se concluía «en la importancia de destinar esfuerzos principalmente a los Centros Termales de Guaviyú y Arapey», que por aquellos años eran los que contaban con mayor desarrollo en infraestructuras y servicios.









