Edición Año XVII N° 862, lunes 20 de mayo de 2024
MARCHA. En la jornada de hoy se llevará adelante la vigésima novena Marcha del Silencio, donde un sector de nuestra sociedad reclama pacíficamente desde hace años por el destino de las uruguayas y uruguayos que fueron detenidos y luego desaparecidos durante la dictadura (1973-1985).
En entrevista publicada ayer por EL PUEBLO, Ingrid Urróz subrayó el motivo de por qué marchan. “Salimos a la calle para tratar de sensibilizar a los responsables y a los que tienen respuestas de dónde están nuestras y nuestros detenidos desaparecidos, por un lado, y por el otro, salimos también a la calle para cultivar la memoria, porque ellos van realmente a desaparecer si dejamos de recordarlos y de hacer esta marcha todos los 20 de mayo”.
La primera marcha fue en 1996, convocada por Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos, eran pocos, y desde entonces, año a año ha ido creciendo, no importando si hacía frío o si estaba lloviendo, en silencio marchaban, con imágenes de quienes faltaban para que no faltasen y todos dijeran por ellos, “presente”.
Por qué la marcha se sostiene en el tiempo y por qué sigue creciendo cada año fue la pregunta que también respondió Ingrid en dicha entrevista. “Pienso que una de las causas puede ser por la validez de lo que se pide, se pide memoria para no repetir lo que se hizo, se pide verdad para que sepamos lo que pasó y se pide justicia cuando se producen delitos de lesa humanidad. Supongo que eso es lo que hace que cada vez haya más jóvenes y personas”.
Este año el lema de la marcha será “Ellos saben dónde están, exigimos respuestas”, y la concentración será nuevamente en la esquina de Uruguay en la intersección de las calles Zelmar Michelini y Héctor Gutiérrez Ruíz a la hora 19, para recorrer luego la principal avenida de nuestra ciudad hasta la Plaza Treinta y Tres.
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ACLARACIÓN. Cierta postura política sostiene que en nuestro país hay actualmente en plena democracia “presos políticos”.
Hay que aclarar que en cumplimiento de la Ley de Caducidad de la Pretensión Punitiva del Estado votada por el Parlamento en diciembre de 1986 y refrendada en dos oportunidades por el pueblo uruguayo (por referéndum en 1989 y por plebiscito en 2009), fueron detenidas y condenadas personas que cometieron delitos que van desde el secuestro de bebes, torturas, violaciones, lesiones personales, homicidios y por la desaparición de personas, es decir, que fueron condenados por el Poder Judicial en pleno uso de sus prerrogativas constitucionales y con la garantía del debido proceso por ser delincuentes que cometieron delitos aberrantes.
La diferencia es sustancial y vale la aclaración como forma de no aceptar la deformación de nuestra historia.
Hasta la semana que viene… y tilo pa’la barra!
