Ayer, el Hogar Estudiantil Simón Rodríguez celebró sus 40 años de existencia con un emotivo acto en el que participaron autoridades locales, funcionarios, alumnos, ex alumnos, vecinos y amigos de la institución.
La jornada estuvo marcada por un sentido homenaje a quienes, desde su creación, han sido parte fundamental de este proyecto que sigue brindando oportunidades a jóvenes de todo el departamento.
En la parte oratoria se coincidió en destacar la voluntad de quienes promovieron la idea y todos quienes la apoyaron, entre ellos todos los ediles de la Junta Departamental y el Intendente.

Por la Junta Departamental Marcicio Pérez celebró al hogar como un pilar de la comunidad.
«El hogar es más que una institución pedagógica, es la casa», destacó Pérez, refiriéndose a cómo este lugar ha sido el refugio para muchos jóvenes de áreas rurales que no contaban con los medios para continuar sus estudios en la ciudad. Según relató, hace 40 años la situación era complicada para los estudiantes de las zonas más alejadas: «La familia rural que sus hijos terminaban la escuela, los sueños, la aspiración… estaban desamparados», dijo Pérez, al referirse a los desafíos que enfrentaban estos chicos para acceder a la educación secundaria en Salto.
Pérez resaltó además la proeza de crear el hogar en un contexto de escasos recursos, sin comunicación rápida con las zonas rurales y sin los avances tecnológicos de hoy. En ese momento, «la familia de ustedes, pongan a la familia de ustedes, pónganse en las estribaciones de la cuchilla de Haedo, Guaviyu Arapey, Belén o Constitución», remarcó Pérez, invitando a los presentes a reflexionar sobre las dificultades que enfrentaban aquellos jóvenes que decidieron dar el salto hacia una educación más allá de su entorno familiar y rural.
Leonardo Vinci ,la importancia de la voluntad y el compromiso del pueblo
Por su parte, Leonardo Vinci, en representación de los impulsores del Hogar, destacó la relevancia de esta institución como un ejemplo de esfuerzo conjunto. «Hoy es un día de inmensa alegría», comenzó Vinci, quien reconoció que el Hogar Estudiantil Simón Rodríguez ha sido un proyecto que ha perdurado durante 40 años gracias al apoyo constante del pueblo de Salto y a la decisión de las distintas administraciones. «Esto existe porque el pueblo de Salto quiere que exista», afirmó.
Vinci compartió cómo, en 1980, la realidad de los estudiantes rurales era compleja. «No había luz eléctrica en campaña, no había comunicación, no había viviendas de MEVIR fuera de Pueblo Celeste, y el liceo más cercano estaba en Villa Constitución», explicó. Sin embargo, fue gracias a la acción decidida de quienes comprendieron la situación y asumieron la responsabilidad de cambiarla que el hogar comenzó a gestarse. «Nosotros el 15 de febrero cantamos el himno y terminamos de cantar el himno y nos pusimos a hablar de este tema», recordó Vinci. «No demoramos mucho porque en pocos minutos todos estuvimos de acuerdo».
El compromiso de la comunidad y las autoridades fue tal que en pocos días se comenzó a dar forma al proyecto, que, como señaló Vinci, no tenía dudas sobre su éxito: «Lo único que teníamos en la cabeza era la idea, nos imaginábamos que era lo que podía pasar en el porvenir».
Ingrid Urroz: Un compromiso con la educación y el bienestar de los jóvenes
La Intendenta de Salto, Ingrid Urroz, también expresó su reconocimiento y apoyo a la labor del Hogar Estudiantil Simón Rodríguez. «El espíritu que generó esta idea, la rapidez con que se concretó, lo que indica que cuando uno quiere hacer algo y realmente existe la voluntad, las cosas se pueden hacer», destacó Urroz. En su intervención, la Intendenta hizo hincapié en la valentía de quienes hicieron posible este hogar y, en particular, de los jóvenes que decidieron dejar sus hogares para perseguir sus sueños. «No es cualquiera que recorre a caballo los kilómetros que recorrió para ir a notarse, no es cualquiera que deja su casa, su madre, su padre, su abuela y se va a un mundo que no conoce atrás de un sueño», señaló, subrayando el esfuerzo personal y familiar que implicaba esa decisión.
Urroz también reflexionó sobre el valor de la educación en la vida de las personas y cómo la creación de este hogar permitió que muchos jóvenes pudieran seguir sus estudios y alcanzar sus metas. «El compromiso de seguir aportando para que este hogar pueda seguir trabajando como está trabajando», dijo la Intendenta, reafirmando el apoyo de la administración actual para que el hogar continúe siendo una institución fundamental en la formación de los estudiantes.
Un legado que trasciende generaciones
A lo largo de estos 40 años, el Hogar Estudiantil Simón Rodríguez ha sido testigo de innumerables historias de superación, sacrificio y éxito. Hoy, tras décadas de trabajo y dedicación, sigue siendo un pilar fundamental para la educación en Salto, albergando a jóvenes de todos los rincones del departamento y brindándoles la oportunidad de acceder a una educación secundaria en la ciudad. Los testimonios de quienes han sido parte de su historia, tanto como estudiantes como docentes, reflejan el impacto positivo que ha tenido en la comunidad.
Con el compromiso de seguir mejorando y adaptándose a las nuevas realidades del contexto educativo y social, los 40 años del Hogar Estudiantil Simón Rodríguez son un testimonio de que, en Salto, la educación siempre será una prioridad. Los desafíos son muchos, pero como afirmaron las autoridades presentes, lo importante es seguir adelante, manteniendo el espíritu de cooperación y esfuerzo conjunto que hizo posible este proyecto.
Así, el hogar sigue adelante, con la esperanza de seguir siendo un faro de oportunidades para los jóvenes de Salto, brindándoles las herramientas necesarias para construir un futuro mejor.