Este 16 de junio, la plaza de armas fue escenario de una emotiva ceremonia conmemorativa por el 188.º aniversario de la creación de la Jefatura de Policía de Salto, fundada en 1837. La actividad reunió a autoridades nacionales, departamentales, representantes diplomáticos de Argentina, integrantes de las Fuerzas Armadas, funcionarios policiales, familiares y vecinos de la comunidad, en un encuentro cargado de historia, reconocimiento y compromiso.
Durante el acto, se destacó el largo camino recorrido por la institución, que a lo largo de casi dos siglos ha sabido adaptarse a los desafíos de cada época, manteniendo siempre como eje central su vocación de servicio y protección de la ciudadanía salteña.
En el discurso central, se subrayó la importancia de cada integrante de la fuerza, sin distinción de jerarquías: desde el personal ejecutivo hasta los administrativos, técnicos y de servicio. “Todas las funciones suman”, se remarcó, al tiempo que se reconoció especialmente a quienes prestan tareas en zonas rurales, muchas veces en condiciones exigentes y lejos de sus hogares.
Se puso de relieve, además, el proceso de mejora de la infraestructura policial, con la remodelación reciente de las Seccionales 2.ª, 4.ª, 15.ª y 16.ª, y con las obras en curso en Villa Constitución y Salto, así como el próximo proyecto para la Seccional de Belén. Estas inversiones no solo fortalecen el funcionamiento operativo, sino que dignifican el trabajo diario de los efectivos y mejoran la atención a la población.
Uno de los momentos más sentidos del discurso fue la mención a las familias del personal policial, a quienes se dedicó un reconocimiento especial por su rol silencioso pero esencial: ser el sostén emocional que permite a los funcionarios cumplir con su deber.
“Detrás de cada uniforme hay una persona comprometida. Una persona que arriesga su bienestar, muchas veces incluso su vida, para cuidar la de otros”, expresó con énfasis el orador.
También se agradeció la labor conjunta con otras instituciones del departamento, por su rol en la construcción de una convivencia más pacífica y solidaria, y se reafirmó el compromiso de continuar trabajando con cercanía, profesionalismo y humanidad.
La jornada concluyó con un fuerte aplauso dedicado a todos quienes integran la Policía de Salto, renovando el espíritu de servicio que los ha guiado durante estos 188 años de historia y vocación.
