Claramente, sin ningún tipo de dudas, el de ayer fue el día en que más gente esperaba que lloviera. En realidad, lo hacían con la ilusión que la lluvia trajera alivio ante tanto calor. Amaneció nublado y algo llamativo fue que las paradas de motos se veían bastante desoladas: es que muchos prefirieron trasladarse en ómnibus o a pie con un paraguas a mano.
Sin embargo hubo que esperar hasta pasado el mediodía para que las nubes desataran lo que por un rato fue un verdadero diluvio. El tránsito alrededor de las 13.30 estaba muy complicado en las esquinas donde el agua se acumulaba en grandes cantidades, como Brasil y Juncal por ejemplo.
Más o menos a esa hora, una lectora nos enviaba el video de cómo se producía el desagüe del Estadio Ernesto Dickinson. A raudales caía el agua hacia calle Agraciada, y por supuesto esa cuadra se había transformado, como nos decía ella misma, en «un río de agua y barro». ¿No se podrá encontrar otra forma para quitar el agua?
Ha venido siendo una práctica bastante habitual de la Junta Departamental en los últimos tiempos, sesionar en otros lugares. Hemos podido saber que la primera, o una de las perimeras sesiones después de Semana de Turismo tendrá lugar en el Liceo N°1, en el marco de las celebraciones por sus 150 años. Algo histórico, sin dudas.
