Estaba más muerta que viva
Dr. Álvaro Galiana, sobre la condición de la niña al ingresar al hospital
Un episodio de extrema violencia conmocionó al barrio Nuevo Ellauri en Montevideo, cuando un hombre de 22 años fue asesinado a balazos mientras sostenía a su hija en brazos. La menor, alcanzada por múltiples disparos, logró sobrevivir tras una compleja recuperación.
El ataque que dejó a una niña gravemente herida
El crimen ocurrió el 6 de enero de 2025 en la intersección de San Martín y Teniente Rinaldi. Rodrigo Nahuel Pintos Dorta, de 22 años, fue atacado a tiros por agresores en moto mientras llevaba en brazos a su hija de 2 años. Según reportes, el joven recibió ocho disparos y falleció en una clínica poco después. La niña, impactada por al menos cuatro proyectiles, fue trasladada en estado crítico al Hospital Pereira Rossell.
En la escena del crimen se encontraron 17 casquillos de bala de pistolas Glock, de los cuales ocho pertenecían al Ministerio del Interior. Se presume que Pintos Dorta portaba un arma al momento del ataque, pero esta fue retirada por allegados antes de su traslado al hospital.
Un historial de violencia
Pintos Dorta tenía un amplio prontuario criminal. En 2020, cuando aún era menor de edad, fue condenado por asesinar a una mujer policía durante un robo, pero solo cumplió dos de los cinco años de condena. También se le vinculó con otros homicidios previos, incluyendo el asesinato de un taxista y un repartidor en rapiñas.
El día del ataque, se presume que iba armado y que pudo haber intercambiado disparos con sus agresores mientras sostenía a su hija. La policía investiga el móvil del crimen y la posible conexión con conflictos entre bandas delictivas.
La lucha por la vida y el milagro médico
Se improvisó un quirófano en un pasillo del CTI porque no tenía posibilidad de vivir si la subían de piso.
Dr. Galiana
Tras el ataque, la niña fue sometida a múltiples cirugías. El doctor Álvaro Galiana, director del Hospital Pereira Rossell, recordó que la primera intervención debió realizarse de urgencia en un pasillo del CTI, ya que su estado era crítico. “Estaba más muerta que viva”, relató Galiana en entrevista con Telenoche.
Después de dos meses de hospitalización, la menor recibió el alta médica. Aunque quedó con algunas secuelas, los médicos destacan su recuperación como un verdadero milagro.
