Se trata de dos medidas que se han anunciado para comenzar a ser aplicadas en el país y seguramente que compartimos su llegada y entendemos que serán muy beneficiosas.
Sin embargo, entendemos que suponen “parches” o medidas sancionadoras que sólo cumplirán un rol importantísimo si se aplican a todos por igual y a toda hora, porque en este país no faltan leyes o normas, sino que falta quien las haga cumplir a rajatabla.
La libreta por puntos debió ser implementada hace ya muchos tiempo, porque si un conductor comete varias infracciones y sobre todo de las denominadas más “graves” debe ser erradicado de las rutas nacionales por lo menos hasta que aprenda a respetar las normas y leyes que rigen esta actividad.
Mucho nos tememos que luego nos encontremos con semáforos que “no funcionan” a determinadas horas o sencillamente están “apagados”, como sucede muchas veces con las cámaras filmadoras.

Si la normativa se pone en vigencia a todos por igual no dudamos que será beneficiosa, ayudando a disminuir el vergonzoso índice de “siniestros” que ostenta nuestro país.
Pocos días atrás supimos también que en la región, Uruguay es de los pocos países que no exigen horas de conocimiento teórico sobre conducción vehicular. Tanto en Argentina, como en Chile y Brasil, se exige una importante cantidad de conocimientos teóricos que deben demostrarse al momento de aspirar a obtener la licencia de conducir.
Nadie ignora que en el Uruguay es fácil conducir porque las normas son muy lasas y sobre todo porque no se exige mucho. Es hora de hacer respetar las normas y sobre todo de poner en práctica las exigencias de la Ley Nacional de Tránsito.
Para ser claros, no creemos que el mayor problema sea la escasez de personal de Policía de Tránsito, porque estamos seguros que si hubiera exigencias estrictas y se aplicaran como corresponde, el número de efectivos policiales pasaría ser una elemento insignificante.
Insistentemente hemos señalado que las infracciones están a la orden del día. Conductores que circulan por las banquinas, motonetistas que adelantan por la derecha, motos sin luces, ciclistas que circulan uno al lado de otro y no en fila india, pero nadie les advierte de la infracción que cometen.
El colmo se produce cuando las infracciones se cometen a la vista de los controladores y éstos nada dicen por no “complicarse”.
Seguiremos con el tema porque consideramos que de nada vale lamentarse del resultado de una infracción que pudo y debió ser sancionada. A.R.D