Molestan y molestan los mosquitos estos días de calor. Es cierto que hubo fumigaciones en algunas zonas, pero a veces contra la naturaleza poco hay que hacer. A propósito, alguien nos hacía notar que en el Cementerio Central, «está brava la cosa…hay algunas partes que son verdaderos focos». Se refería específicamente al agua acumulada que queda en la parte subterránea de algunos panteones. Buen dato; ojalá se actúe, sobre todo pensando en insectos transmisores de ciertas enfermedades, de los que hay que cuidarse mucho.
Hablando de agua estancada, hemos recibido esta semana dos planteos de vecinos preocupados. Por un lado, por una rotura en la avenida Ramón J. Vinci (ex Apolón), que hace que corra «mucha agua tanto por Julio Delgado como por República Argentina», nos dicen.
Por otro lado, en Ceibal, esquina de las calles Patulé e Ituzaingó, hay problemas con una cloaca tapada, «por lo menos desde hace un año», comentan los vecinos.
Entre tanta cuestiones vinculadas al tránsito que habitualmente se plantean en esta columna, se podría agregar lo que ayer nos acotaba un lector: «qué cantidad de parejas se ve andar en moto con niños pequeños en el medio, bebés incluso, fíjense que en una caída un bebé no tiene reacción para cubrirse…Un peligro». Le asiste toda la razón a nuestro lector; es de las tantas cosas que se ve a diario y que no deberían pasar, pero pasan.
