En muchos contextos universitarios la evaluación para la aprobación o exoneración de las unidades curriculares de física es tradicional y se basa en dos parciales, que requieren resolver ejercicios de lápiz y papel. Los contenidos disciplinares son el centro y desde el rol docente se garantiza el “dar todos los contenidos”. “Dar” contenidos es muy diferente de construir aprendizajes (proceso complejo). En la lógica tradicional el estudiante es un espectador de lujo durante el desarrollo de las clases y un protagonista en dos pruebas. Esto tiene como consecuencia que muchos estudiantes se interesen poco por evidenciar conocimientos durante el desarrollo del curso (la participación es muy reducida).

La actitud proactiva e inquisidora ante el conocimiento de aula es casi nula. Más aún, al finalizar el cursado los estudiantes tienen poca comprensión de los conceptos y procedimientos que son objeto del curso y/o la carrera, incluso aquellos que son exitosos en los parciales.
Cuando al estudiante se le brinda la posibilidad de ser protagonista de su proceso de formación, trabajando de forma coordinada y supervisada con sus docentes, la posibilidad de construir aprendizaje duradero es mayor. Se generan condiciones básicas para generar competencias de aprender a aprender, el desarrollo del pensamiento crítico, la creatividad e innovación, la adquisición de conocimientos sobre TIC, el desarrollo de habilidades blandas, entre otras. La evaluación para este tipo de enfoques dista de lo tradicional y debe transformarse para valorar los múltiples logros de los estudiantes. Desde luego, más momentos de la evaluación (distribuida) son propicios para la retroalimentación constante y repetida por parte de los pares, los docentes y visitantes externos de la comunidad educativa.
Muchos estudiantes valoran el ser protagonistas en las propuestas de aula y tener una evaluación distribuida en el semestre, aunque les implique continuidad en el esfuerzo.
Cuando se les consulta sobre la forma de evaluación algunos de ellos dicen: “es justa”, “alimenta el razonamiento”, “se aprende más y no te olvidas”, “al explicar hay que argumentar y manejar los nervios ante el público”, “esta modalidad se asemeja a lo que tendremos en el campo profesional”, “el feedback es inmediato”.
En la UCU Campus Salto se incluyen diversas instancias de evaluación formativa y de acreditación para que el estudiante sea protagonista. Instancias propicias para aprender del otro y con el otro.